SANTIAGO.-La presidenta del Partido Comunista, Gladys Marín, justificó el paro de los trabajadores del próximo 13 de agosto señalando que es una señal inequívoca de la existencia de graves problemas sociales que no pueden pasar desapercibidos.
En entrevista con radio Universidad de Chile explicó que "el paro no es un antojo de los dirigentes sindicales, ni el antojo de un partido político, ni la pretensión de crear artificialmente problemas al gobierno, los problemas existen", dijo.
En ese sentido, llamó al Gobierno a atender las demandas de los ciudadanos y no generar alarmas ante la eventualidad de desmanes durante la manifestación.
"Todos sabemos que en cualquier manifestación, no sólo de los trabajadores, pueden haber asuntos que se realicen que no están dentro de las instrucciones generales. Pero por qué se pone el acento en eso, por qué se está dando pie para que se avalen las amenazas de represión que ya están surgiendo por parte del Gobierno", sostuvo la dirigenta.
Marín destacó que, en Chile, las movilizaciones sociales extrañamente generan incertidumbre entre las autoridades, a diferencia de otros países donde las manifestaciones son parte del proceso democrático.
La dirigenta vinculó este temor, a la política de consensos que impera en nuestro país.
"Ha habido un gran intento por desmovilizar a la gente. Ha existido una apuesta por los consensos políticos que ha perjudicado la labor sindical", enfatizó.
Por último, la presidenta del partido comunista llamó a los militantes de su colectividad a no asistir a sus trabajos y, en cambio, participar en las concentraciones.
