SANTIAGO.- Un llamado al Gobierno para que no autorice marchas por el centro de Santiago el día 11 de septiembre realizó el alcalde Joaquín Lavín, preocupado por los eventuales destrozos que podrían afectar a los bienes públicos y privados.
"Las marchas son legítimas, pero si se van a autorizar tiene que haber alguien
que se haga responsable", dijo, y agregó que "la protesta de la CUT nos significó 25 millones de pesos en daños a la ciudad y con eso me refiero a
lámparas que se rompieron, paletas publicitarias que se destruyeron, rejas que se arrancaron, bancos o escaños de plazas peatonales... eso no puede seguirse repitiendo porque nadie responde. Nosotros presentamos las acciones judiciales, pero al final ¿quién es el responsable? Nadie".
"Yo soy partidario —continuó— de que no se autoricen marchas en el centro para este 11 de septiembre y esa era la posición del Ministerio del Interior. Ojalá que eso no cambie y si cambia quiero decir una cosa: entre una marcha y una manifestación específica frente a un lugar, yo prefiero la manifestación. En cambio, lamentablemente la marcha pasa por muchas partes y se rompen muchas cosas... las concentraciones son menos dañinas".
Desde ya, el edil adelantó que para evitar mayores pérdidas serán sacadas las
luminarias de los puntos conflictivos, así como otro tipo de material removible y que se intentará que cada evento tenga responsables por lo que pueda suceder.
Alianza Lavín-Trivelli-Lihn
Por otra parte, esta mañana quedó formalizada una alianza estratégica entre
Lavín, el intendente metropolitano, Marcelo Trivelli y el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Fernando Lihn, que busca erradicar el comercio callejero del centro de Santiago.
