SANTIAGO.- El concejal de la municipalidad de Recoleta, Mario Jeréz Espina, manifestó su más profundo rechazo a la medida "arbitraria" que tomó el alcalde Gonzalo Cornejo para el sábado 13 respecto al cierre del Cementerio General para la marcha que realizan año a año las agrupaciones de Derechos Humanos y que termina en el memorial de desaparecidos.
Además manifestó que el hecho le parece grave por que "el Cementerio General es un espacio público, patrimonio de todos los chilenos y por tanto, no puede ser cerrado arbitrariamente".
A juicio de Jérez esta medida "contradice directamente el espíritu de unidad y reflexión que han tratado de fomentar los distintos sectores políticos de nuestro país al prohibir el legítimo derecho a expresarse a quienes en parte fueron participes de los hechos históricos".
Lamentó la actitud del alcalde acusándolo "de su desmedida aparición en los medios y toma acciones sin medir las consecuencias".
Finalmente afirmó que "cree que esta es una medida irresponsable, antojadiza, que sólo busca beneficios políticos a corto plazo y que en nada ayuda al espíritu de unidad que debe existir en Chile, es por ello que los actos de violencia que se produzcan serán de única y exclusiva responsabilidad del señor alcalde".