SANTIAGO.- Por falta de méritos, el juez Raúl Rocha, quien oficia como ministro en visita, dejó en libertad a Andrea Urzúa y Andrés Quilodrán, de 23 y 38 años respectivamente, dos de las cuatro personas que fueron detenidas el pasado lunes en el centro de Santiago cuando portaban nitroglicerina y detonadores.
A pesar de esta resolución Urzúa y Quilodrán deben mantenerse ubicables para ser requeridos nuevamente en el marco de las diligencias judiciales que pudieran ejecutarse.
Las otras dos personas, Ingrid Toro, de 20, y Cristina Briones, de 30, aún están detenidas en dependencias de Carabineros, institución que los pondrá a disposición del juez el próximo lunes 8 de septiembre.
Las cuatro personas fueron sorprendidas en la madrugada del pasado lunes en un restorán del centro de Santiago, donde se les requisó medio kilo de nitroglicerina, detonadores y numerosos panfletos en los que se llamaba a atacar intereses extranjeros, en el marco de lo que denominaron un "septiembre combativo".