IQUIQUE.- Pensando en emigrar de la radio Paulina si le ofrecen otra alternativa está el locutor Luis Ramírez Maldonado, 28 años, quien se hizo famoso a nivel mundial por regalar en su programa una hora de placer con una ''dama de compañía''. El premio lo alcanzó a cobrar en el motel Babilonia un radioescucha de 23 años, pero la segunda jornada -correspondiente a los favores de un veddetto- fue restringida por la orden perentoria del director de radio, el concejal UDI Ramón Alberto Galleguillos, quien le dijo: "o terminas con el sexo explícito, o te vas".
Ayer el celular de Ramírez no paró de sonar en todo el día y lo entrevistaron desde España, Argentina, Venezuela y todo el país. Por el momento su programa The Frack volvió a la normalidad y es comentario obligado para los iquiqueños, alcanzando una sintonía mayoritaria entre la medianoche y las tres de la madrugada donde el locutor ahora tiene como premios pizzas, completos y entradas a la discoteca Pharos.
Durante la emisión algunos le preguntan "¿y qué pasó con las minitas?", pero Ramírez sólo atina a desviar el tema dado que el espacio lo arrienda en Paulina y se comprometió a no retomarlo debido a que no se ajusta a la línea programática de la estación.
Si bien en un comienzo estaba muy impactado por los coletazos que generó el concurso y la molestia que pudo causar en algunos sectores, el locutor no descarta la posibilidad de emigrar a otra estación que acepte el concurso. "Paulina tiene una línea y yo cometí un error sin mala intención, pero perfectamente podría desarrollar la idea en otra estación. De hecho las señoritas de la agencia de Damas de Compañía me llamaron y solidarizaron conmigo".
De la misma opinión es Sandra Roselot, dueña de la agencia de Damas de Compañía Sandra&Judith, quien indicó estar dispuesta a seguir con el concurso en cualquier parte. "Yo donde quiero puede seguir con el proyecto y el locutor tiene todo mi respaldo. Yo donde quiero me paro y hago negocios".
Agregó que el único problema, hasta el momento, lo sufrieron las señoritas que posaron en la fotografía dado que fueron reconocidas, "pero es algo a lo nos arriesgamos y es parte del trabajo".
El director de la radio, Ramón Galleguillos, explicó que no podía permitir que se ofreciera sexo explícito y que se enteró de la situación mediante los diarios. "Cuando pasó esto yo estaba durmiendo y al otro día casi se me cayó el pelo. Inmediatamente llamé a terreno al locutor y le expliqué nuestra línea editorial".
Confesó que en un principio lo único que deseaba era despedirlo, "pero con más calma me di cuenta que fue un error y puede seguir con su trabajo mientras no vuelva a ofrecer el polémico concurso. Es cierto que en el último tiempo nuestra sociedad ha tenido un destape, pero ello es muy distinto a ofrecer sexo por la radio y no lo podemos aceptar".
A lo anterior sumó las posibles implicancias políticas, dado que el polémico caso podría ser manipulado desde una perspectiva política debido a su condición de concejal de la UDI.
La superintendanta de distrito de la Iglesia Metodista de Iquique, Miriam Cabas, lamentó la situación y sostuvo que ello es una demostración de la decadencia que se observa en algunos medios de comunicación. "Llegar a ese extremo es muy lamentable y lo único que nos queda es reforzar los valores en los colegios".
