SANTIAGO.- Los últimos casos de muertes por falta de donantes llevó al Hospital Clínico de la Universidad Católica a adquirir un corazón artificial, diseñado para soportar una crisis cardíaca aguda, y que puede ser utilizado por un nuevo paciente.
En conversación con radio Cooperativa, el cardiocirujano Carlos Baeza explicó que la máquina permitirá "salvar vidas, que de otra manera, indefectiblemente se perderían".
El corazón Aviomed puede salvar a "una persona que está en falla cardíaca aguda, en buenas cuentas, una persona que está falleciendo. Nosotros lo conectamos a esta máquina y podemos mantenerlo vivo en condiciones muy cercanas a lo normal, por aproximadamente un mes, incluso más". Este período -agregó- permitirá tener más tiempo para la búsqueda de un donante.
El órgano artificial tiene un costo de cerca de 8.000 dólares (cerca de cinco millones 64 mil pesos), y está disponible en Estados Unidos, algunos países de Europa y Japón.
La falta de órganos es preocupante
La muerte de María José Pérez, a la espera de un donante, es la cuarta que se produce durante este año.
En la última década se realizaron 1.876 trasplantes de riñón, 274 de hígado, 84 de corazón y 34 de pulmón. El 63% de los donantes es hombre y el 37% mujer. La lista de espera actual llega a 930 personas. Es encabezada por quienes esperan un riñon (800), y luego le siguen los que precisan un hígado (70), corazón (25), pulmón (15), páncreas (10) y combinados (10).
La tasa de donante efectivo en Chile es una de las más bajas del mundo. Cayó de 9,9 por millón de habitantes en 2000 a 7,7 el año pasado. Si se compara con otros países, es preocupante. En España esta tasa llega a 32 por cada millón y en Estados Unidos a 25. Para ser donante, basta con expresar este deseo en vida a sus familiares más cercanos, pero también se puede formalizar al renovar la cédula de identidad o la licencia de conducir o ante un notario. Sin embargo, quedan excluidos los portadores de sida, quienes tienen tumores malignos extraneurales o infecciones no controladas.