SANTIAGO.- La jueza Gabriela Pérez, quien investiga la supuesta extorsión de la que habría sido víctima el magistrado Daniel Calvo, y que logró su remoción del caso Spiniak, tomó una nueva declaración a Sebastián Rodríguez, el administrador de un sauna gay y que inició toda la polémica.
Rodríguez salió rápidamente desde el Palacio de Tribunales y declinó hablar sobre las diligencias de la jueza, pero sólo se limitó a decir que "Chilevisión miente".
Las declaraciones de Rodríguez, quien dijera que Calvo era un asiduo visitante al sauna que él administraba, llevaron a la Corte Suprema a tomar la resolución de remover al juez de la investigación de la supuesta red de pedofilia, que encabezaría el empresario Claudio Spiniak.