SANTIAGO.- Adila Venegas, la esposa de Claudio Spiniak Vilensky, negó que el empresario -acusado de liderar una presunta red de pedofilia- sea un homosexual y que se haya relacionado con menores, al tiempo que aseguró que piensa que en el caso hay involucrada más gente poderosa.
Las declaraciones fueron hechas en una entrevista que la mujer concedió a Revista Cosas y que será publicada en la edición de mañana viernes.
Según el artículo, Adila Venegas, quien está separada de hecho de Spiniak pero sigue legalmente casada con él, aún está "shockeada" por el caso.
La mujer rememoró la época en que conoció al empresario describiéndolo como "encantador". Sobre las cualidades con las que la cautivó, señaló que fueron "su inteligencia y esos ojos preciosos que tiene. Era siete años mayor que yo, parecía un hombre muy maduro. Fuimos muy yuntas. Practicábamos karate, ski, navegábamos... Nos llevábamos súper bien, jamás peleamos".
Agregó que sólo después de casados advirtió algunos de sus problemas con las drogas. "Nunca antes me di cuenta de que era drogadicto. Yo empecé a notar algo raro cuando se dormía tarde y fumaba... Se trasladó a dormir a la pieza del segundo piso. Lo empecé a controlar con el tema de la droga. El empezó a sentirse acosado y me lo negaba. Yo me metía a su pieza y tenía la coca ahí".
Venegas agregó que puede asegurar que Spiniak no es homosexual, ni degenerado "ni es el maldito que todos pintan. Es un hombre que tiene la mente enferma por llevar todos estos años consumiendo drogas y alcohol sin parar".
También aseguró que los tipos con los que se metió lo llevaron a hacer lo que hizo. "Un grupo de degenerados que lo pervirtieron", dijo.
Agregó que cree que lo tienen como "chivo expiatorio, porque no entiendo por qué -habiendo seis detenidos- al único que le muestran la cara es a Claudio Spiniak (...) Pienso que esto va a reventar, porque hay más gente poderosa como Claudio. Si no, no se hubieran perdido algunos videos y la Pía Guzmán no habría dicho lo que dijo".
También señaló que dudaba que el empresario se haya involucrado con menores de edad ni tampoco que los engañara. "Estos jóvenes sabían a lo que iban. Este cabrito que se arrancó de la casa de Claudio no fue porque lo iban a violar, sino porque probó la droga y se volvió loco", dijo en referencia al adolescente que fue encontrado por vecinos de Santa María de Manquehue que dieron aviso a funcionarios policiales.
Respecto a cuál cree es el futuro de su aún marido, dijo que cree "que va a pasar unos buenos años en la cárcel. Creo que cuando salga se va a ir de Chile. Para entonces, mi hija mayor va a tener unos 20 años".
Ante la pregunta por el entorno que ella y sus hijas han debido enfrentar debido a la divulgación del caso, señaló que han sentido el apoyo de todo el mundo, pero no el de la familia de Spiniak.
"En el colegio se han portado maravillosamente bien. El padre John O'Reilly ha venido a conversar con nosotras en muchas oportunidades y, lo más increíble de todo, es que la familia de Claudio Spiniak -sus padres y hermanos- ni siquiera han llamado para saber cómo están".
Respecto a cómo les ha explicado a ellas la situación en que está envuelto su padre, relató que al principio recortaba los diarios para esconderlos, "hasta que un día la mayor captó que le faltaba una página y me lo comentó".
"Sin duda, la más afectada es la mayor, que tiene 16 años. Es la que ha tenido más contacto con su papá. La chica me da la sensación que es la que más lo quiere, porque es la que está menos contaminada con todo esto", comenta.