CONCEPCIÓN.- En una decisión histórica, la Corte de Apelaciones de Concepción, ordenó al Servicio de Salud de Talcahuano pagar 100 millones de pesos a una madre cuyo bebé resultó con daños de por vida, debido a una negligencia médica.
El hecho se remonta a diciembre de 1998, cuando Angélica Fuentes llegó hasta el hospital de Higueras con síntomas de parto y con el precedente de tener un bebe en su vientre de más de cuatro kilos, por lo cual se hacía necesario realizar una cesárea.
Según declaró la propia unidad de responsabilidad médico legal, a pesar de esto se le habría obligado a un parto normal y con tres horas de retraso.
Según informó radio Chilena, a raíz de este hecho, el bebé -bautizado como Marco Andrés Torres Fuentes de 5 años- quedó ciego, sordo, mudo y sin ningún tipo de sensibilidad o control del esfínter.
El Servicio de Salud de Talcahuano deberá cancelar 100 millones de pesos por daño moral y a otorgar de por vida atención médica al menor y en el centro de salud que desee la familia.