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"Contacto" dio a conocer testimonios de caso Lavandero

El programa de Canal 13 entrevistó a niñas que habrían sufrido abusos sexuales por parte del parlamentario, así como también testigos de sus conductas con menores.

13 de Enero de 2005 | 23:55 | El Mercurio en Internet
SANTIAGO.- Un extenso reportaje de las denuncias sobre presuntos abusos sexuales del senador Jorge Lavandero contra menores, transmitió esta noche el programa "Contacto" de Canal 13.

En la emisión, denominada "El caso Temuco", el periodista Emilio Sutherland entregó testimonios de presuntas víctimas del parlamentario y testigos de sus conductas.

La investigación, que el equipo periodístico del programa comenzó en noviembre de 2003, contó con la participación de Iván Cuevas y Gilda Concha, un matrimonio que trabajó 2 años y 3 meses en la parcela que tiene el senador en Metrenco, al sur de Temuco.

La pareja afirmó haber presenciado escenas en las que el parlamentario sostenía encuentros con menores, primero con una niña identificada con las iniciales I.M.S.H. y luego con dos hermanos –M.V.G.C. y J.J.G.C.- que habían sido invitados por Lavandero a pasar el fin de semana en su parcela.

Sin embargo, la relación del matrimonio con el parlamentario llegó a su fin cuando lo sorprendieron con su hija de 12 años en el dormitorio. Posteriormente, la pareja fue despedida de la parcela bajo el argumento de que habían realizado llamadas de larga distancia desde el teléfono del senador.

Tiempo después se produjo un supuesto robo en la residencia de Metrenco, del que ellos fueron sospechosos. Detectives llegaron hasta donde vivían buscando las especies robadas, oportunidad en la que la mujer denunció los hechos de la que ella y su marido habían sido testigos.

Asimismo, el programa presentó el testimonio de otra niña que junto a sus hermanos había sido invitada por el senador a su parcela. La joven narró que el legislador la hizo entrar al jacuzzi, mientras su hermano mayor jugaba Nintendo en una pieza continua. En ese lugar, Lavandero habría tocado partes íntimas de su cuerpo, mientras ella mantenía silencio por temor.

La madre de la joven, Victoria Urrutia, sostuvo que tras la visita su hija presentó conductas extrañas y que se percató de lo ocurrido unos días después cuando leyó el diario de vida de la menor, donde contaba que "el tío Jorge" la había bañado desnuda.

Sin embargo, ese documento ya no existe porque habría desaparecido junto a otras cosas tras un robo que afectó a la familia. Sin embargo, Urrutia afirmó haber informado al entonces concejal Rafael del Canto, amigo de Lavandero, sobre lo que le había pasado a su hija, pero él le habría manifestado que no podía hacer nada.

Entrevistado por "Contacto", Del Canto ratificó haber recibido los antecedentes de parte de la mujer.

Niñas creían en promesas

El 19 de diciembre de 2004, el equipo periodístico de Canal 13 captó imágenes del senador con la menor identificada con las iniciales I.M.S.H. en su parcela de Metrenco. Permanecieron cerca de cinco horas en el lugar y salieron sólo una vez a dar un paseo, oportunidad en la cual se ve a Lavandero golpeándole un par de veces el trasero a la niña.

Según afirmó el programa, la menor ha declarado que para ella Jorge Lavandero representa cariño y bienestar, y que estaba con él debido a que le había prometido que ella iba a ser su secretaria.

La misma promesa les habría hecho a dos hermanas hijas de un matrimonio que también trabajó en la parcela del parlamentario. Las niñas, hoy adolescentes, también entregaron su testimonio, en el cual contaron que el senador fue ganándose su cariño regalándoles dulces y dinero.

Asimismo, en reiteradas oportunidades Lavandero las habría invitado a ver televisión a su dormitorio y muchas veces se quedaban a dormir con él. Era en esas ocasiones en las que el legislador les habría practicado tocaciones en partes íntimas.

Los padres de las niñas afirmaron no sospechar nada, ya que el senador se portaba muy bien con sus hijas. La madre recordó que Lavandero siempre llegaba los jueves o viernes desde Santiago y lo primero que hacía era pedir que las niñas fueran a saludarlo. Sin embargo, las veces que el parlamentario llegaba junto a su entonces pareja Clara Szczaranski no seguía la misma rutina.

La mujer sostuvo que comenzó a sospechar cuando vio que sus hijas eran tocadas indebidamente en la piscina y que todo reventó la vez en que entró al sauna del senador cuando éste se encontraba con una de sus hijas. Allí dijo haber visto a la niña tendida desnuda, y a Lavandero tocándole sus senos y su vagina.

Según se afirmó en el programa, todos los testimonios presentados están en conocimiento del fiscal Xavier Armendáriz y aunque el equipo periodístico intentó contactarse con Jorge Lavandero, obtener su versión de los hechos fue imposible.
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