CONCEPCION.- A 16 mil se elevó el número de damnificados en la Región del Biobío, debido al último frente de lluvias, que hasta anoche seguía provocando deslizamientos de tierra y que hoy debiera dejar la zona. De ellos, mil 660 personas debieron pasar la noche en 24 albergues habilitados, principalmente en la provincia de Concepción.
El sector más afectado de la región es caleta Cocholgüe, donde los damnificados esperan que parte de la villa, donde los inmuebles resultaron con graves daños estructurales, sea reconstruida en terrenos cercanos, más altos y seguros, como uno de propiedad del ex diputado Enrique van Rysselberghe Varela, que está ubicado justo sobre las áreas que resultaron socavadas por las lluvias.
Ello implicaría una solución definitiva para los damnificados y para otros pescadores artesanales que no son propietarios de los terrenos que actualmente ocupan.
En otro sector, si bien hasta anoche no había riesgo inminente de desborde del río Biobío, el municipio de Hualqui habilitó un albergue en el sector 18 de Septiembre. El Ministerio de Obras Públicas, a través de la Dirección General de Aguas, mantiene vigilando cada una hora el nivel del caudal.
Las autoridades regionales de salud están evaluando una campaña de vacunación contra la hepatitis en los albergues o en las poblaciones afectadas por el temporal de esta semana, a fin de evitar que se propague este mal. De visita en Concepción, la subsecretaria de Salud, Cecilia Villavicencio Rosas, señaló que esta medida podría evitar un eventual brote, producto de las condiciones higiénicas en que están los damnificados.
También preocupa la presencia de pediculosis, sarna e incluso el monóxido de carbono emitido por los braseros encendidos dentro de las piezas, que representan un foco de alta toxicidad, especialmente entre los menores. Estos últimos, además constituyen un riesgo de accidentes por quemaduras.
El llamado es a mantener el aseo de baños y extremar los cuidados en la manipulación de alimentos, así como usar jabón y cloro para desinfectar.
