SANTIAGO.- La Quinta Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago resolvió otorgar la libertad a la esposa, hijos y ex colaboradores del general (r) Augusto Pinochet, quienes fueron procesados por los delitos de evasión tributaria y alteración y uso de pasaportes falsos en el marco del caso Riggs.
De esta manera, el tribunal de alzada -integrado por los ministros Carlos Gajardo, Amanda Valdovinos y el abogado Nelson Pozo- confirmó lo dispuesto por el ministro Carlos Cerda, quien ayer les otorgó el beneficio en su resolución.
Los miembros de la familia Pinochet Hiriart junto al ex albacea, Oscar Aitken, y la ex secretaria personal de Pinochet, Mónica Ananías, se encontraban, desde las 8:00 de esta mañana, en dependencias de la Dirección de Gendarmería a la espera de conocer la decisión de la Corte.
A excepción de la esposa de Pinochet, Lucía Hiriart; su hijo Marco Antonio; la ex secretaria, Mónica Ananías y el ex albacea, Oscar Aitken, el resto de los procesados deberá pagar la fianza fijada por el magistrado. Inés Lucía Pinochet tendrá que cancelar tres millones de pesos, su hermana Jacqueline y su cuñada Soledad Olave (esposa de Marco Antonio), un millón; y María Verónica Pinochet, 300 mil pesos.
La hija mayor de Pinochet, Inés Lucía, permanece con orden de aprehensión y arraigo puesto que todavía no se presenta ante la justicia.
Ayer, el ministro Cerda procesó a la familia Pinochet Hiriart y a los dos ex colaboradores por delitos de evasión tributaria -al incurrir en declaraciones y omisiones maliciosamente incompletas-, y alteración y uso de pasaportes falsos en el caso Banco Riggs.
En el fallo se establece un perjuicio fiscal de Lucía Hiriart de 449 millones de pesos. A su hija Lucía, en tanto, se le calcula un monto de 453 millones de pesos; a Marco Antonio, 128 millones; a Jacqueline, 25 millones, y a Verónica, 540 mil pesos.
Además, fueron encausados la esposa de Marco Antonio, María Soledad Olave, por $35 millones, y dos ex colaboradores de Pinochet: el ex albacea Óscar Aitken por más de 1.692 millones y la secretaria personal, Mónica Ananías, por 92 millones.
Los procesamientos
En su resolución de 16 páginas, el magistrado describe que Lucía Hiriart, desde 1989, cuando se produjo la separación de bienes, debía declarar los impuestos sobre los intereses y utilidades provenientes del extranjero. Por eso la encausa por el artículo 97 No. 5 que habla de omisiones maliciosas en sus declaraciones entre el 2000 y 2005.
Su hija Inés Lucía entre los años 1994 y 2005 realizó inversiones que "exceden sus ingresos por ella declarados", y no declaró intereses de cuentas en el exterior. Su encausamiento es por el artículo 94 No. 4 de declaraciones maliciosamente incompletas, y No. 5, igual que su madre. Para fijar los montos de perjuicio fiscal (ver infografía), el juez considera la prescripción de los ilícitos.
El de Marco Antonio es por declaraciones maliciosamente incompletas, por no declarar los intereses de sus cuentas en el Citibank de Nueva York, en los últimos cinco años. Su esposa, Soledad Olave, según la resolución, prestó declaraciones incompletas en 1999, 2002 y 2004.
Jacqueline omitió declarar en 1999 y 2005. Su hermana María Verónica es la que registra el menor perjuicio fiscal (540 mil pesos), por concepto de declaraciones incompletas y omisión, en 1996, 1998 y 2001.
En el caso de Óscar Aitken, el ministro lo acusa de no declarar los ingresos que percibió por sus asesorías a Pinochet. Dice que tenía un contrato del 2% del fideicomiso que alcanzó 6 millones de dólares, y por no considerar los intereses de tres cuentas en el exterior. Mientras que la ex secretaria Mónica Ananías no declaró sus utilidades fuera del país entre 1998 y 2005.