TALCAHUANO.- Greenpeace bloqueó hoy la salida del puerto de Talcahuano de un carguero con destino a Uruguay que transportaba insumos para la construcción de una de las dos controversiales plantas de celulosa en la ribera de un río argentino-uruguayo.
El bloqueo fue realizado por 12 activistas de Greenpeace, que a bordo de dos botes se cruzaron por delante del barco con bandera de Bahamas, cerrándole el paso, explicó la encargada de comunicaciones del grupo, Mónica Infante.
El objetivo de esta acción, que se prolongó por cuatro horas y media, es "instar al gobierno argentino para que no lo deje entrar a sus aguas cuando cruce el Estrecho de Magallanes", explicó Infante.
Dos de los activistas pintaron en el costado derecho del carguero "No a Botnia (la empresa finlandesa que construye una de las plantas) y no a la contaminación por celulosa en la región".
El bloqueo concluyó cuando llegó la guardia costera, que no intervino pero el barco aún continuaba en el puerto.
Polémicas plantas
La decisión de Uruguay de construir las plantas de celulosa ha complicado las relaciones bilaterales con Argentina.
El carguero llevaba parte de las estructuras metálicas para levantar una de las plantas de celulosas sobre el fronterizo Río Uruguay.
"Estamos bloqueando los elementos que serán utilizados para causar un grave daño ambiental. Como ha quedado más que demostrado con Celco, las papeleras contaminan, así ocurre en Valdivia", dijo Greenpeace Chile.
Manifestantes en la provincia argentina de Entre Ríos bloquean dos puentes internacionales sobre el río Uruguay, lo que impide la llegada de las estructuras para la planta Botnia, en la zona uruguaya de Fray Bentos, lo que llevó a la compañía a intentarlo por mar.
"Este no es un problema de un sólo país, sino que de toda nuestra región y por eso demandamos un plan de producción limpia para esta industria", dijo Samuel Leiva, de Greenpeace Chile.
Leiva opinó que los gobiernos de los países del Cono Sur "no están haciendo nada por impedir que las plantas de celulosa se sigan multiplicando (al igual que) la contaminación que producen".
Las plantas de celulosa utilizan dióxido de cloro en sus procesos de blanqueo de la pasta de celulosa, que es altamente contaminante.
Greenpeace demandó para que "Chile como Argentina y Uruguay, adopten un Plan de Producción Limpia para la Industria del Papel que contenga los máximos estándares tecnológicos disponibles".