SANTIAGO.— El ministro en visita Hugo Dolmestch, quien investiga la ejecución y el lanzamiento al mar de cinco detenidos por la policía durante la dictadura militar, reconstituyó este miércoles el hecho, pero admitió la dificultad para encontrar los restos.
"Lo más probable es que no se encuentren", comentó el juez, quien a pesar de eso señaló que aclarar la verdad "es una cuestión muy importante para mí, para la historia y para la tranquilidad de las personas".
Dolmetsch recibió hace poco la confesión del piloto de un helicóptero del ejército, apodado "El Chino" Campos, quien reveló que en septiembre de 1987 fue encargado de trasladar y lanzar al mar los cuerpos de cinco miembros del Frente Manuel Rodríguez.
La diligencia comenzó primero en el Regimiento Arteaga de Peldehue, donde estuvieron detenidos Gonzalo Fuenzalida, Julio Muñoz, José Peña, Alejandro Pinochet y Manuel Sepúlveda, tras ser capturados por miembros de la disuelta Central Nacional de Informaciones (CNI), en represalia al secuestro del coronel Carlos Carreño.
Una vez ejecutados los detenidos en la unidad castrense, sus cuerpos fueron trasladados en un helicóptero hasta la costa del litoral central, donde fueron lanzados dentro de sacos y a fin de evitar que sus restos fueran hallados, se les amarraron trozos de rieles.