El sacerdote Jorge Galaz Espinoza.
(Foto: Pablo Mardones/El Mercurio). |
RANCAGUA.- El tribunal de Rancagua declaró culpable al sacerdote Jorge Galaz Espinoza por los delitos de violaciones reiteradas en contra de dos menores.
Se trató de violación sodomítica contra dos menores con retraso mental severo, en un caso que impactó a la ciudad de Rancagua, informó radio Digital FM.
El sacerdote Galaz Espinoza era director del hogar Pequeño Cottolengo y su defensa alegó inocencia del acusado hasta el último minuto, argumentando que no estaba acreditado que hubiese violación, lo que fue descartado por el fiscal Luis Toledo.
La jueza Alejandra Besoaín, presidenta del tribunal, dio lectura a las justificaciones de este fallo que condenó en forma unánime al sacerdote.
El fallo causó desazón entre decenas de fieles que se encontraban al interior de la sala para expresar su apoyo al sacerdote.
Según el fallo, el religioso, de 42 años, cometió violación contra los menores con retraso mental, M.A.A.G. y C.E.V.V., de 13 y 17 años en la época en que ocurrieron los delitos.
Durante la declaración en junio de M.A.A.G., quien presenta además rasgos de autismo e incapacidad de comunicarse verbalmente, éste emitió un sonido gutural y golpeó el monitor del televisor cuando apareció la imagen de su presunto agresor, lo que para los jueces orales se entendió como un "reconocimiento".
En su defensa, el sacerdote declaró: "Soy un hombre de Dios, entregado en cuerpo y alma. Jamás realicé ningún acto de los que se me imputan (...)
No he violado a ningún niño. Si me hubieran visto en alguna actitud deshonesta, pierda cuidado que la misma gente se hubiera encargado de hacerlo saber".
