SANTIAGO.- En forma pacífica, a las 14:30 horas de esta tarde, cerca de 20 trabajadores y dirigentes del transporte público abandonaron el Palacio Ariztía, sede de la Cámara de Diputados de la capital, que mantenían ocupado desde las ocho de la mañana de este lunes.
Los trabajadores habían tomado la medida para exigir una solución a sus problemas derivados de su exclusión del Transantiago.
A juicio de los manifestantes, al quedar fuera de este proyecto, han sufrido una importante daño en su previsión y en su actividad empresarial.
Por esta razón, los trabajadores solicitaron una indemnización compensatoria para unos siete mil trabajadores y que el Gobierno sea garante del pago de las indemnizaciones y de las deudas previsionales que sus empleadores deberán cancelarles en febrero del próximo año.
Además, denunciaron importantes irregularidades en el proceso de asignación de los tramos que se adjudicaron las empresas transportistas, por lo que buscaban que la Cámara de Diputados estableciera una comisión investigadora.
Tras la mediación del presidente de la Cámara de Diputados, Antonio Leal (PPD) y del diputado Carlos Olivares (DC), quienes se comprometieron a formar la comisión solicitada, los manifestantes se retiraron conformes y este martes serán recibidos por la Subsecretaría General de la Presidencia, donde expondrán sus demandas.