CALAMA.- Una simple visita para consultar sobre el estado de salud de algunas personas en el Servicio de Urgencia del hospital Carlos Cisterna, terminó dando a conocer una realidad de constantes robos de diferentes artículos y del "reality" que se vive al interior del recinto cuando decenas de vagabundos llegan a la sala de espera a pasar la noche, a comer y consumir alcohol en la entrada.
Personal del servicio público no hizo más que confirmar lo que sucede hace mucho tiempo. "Nos agreden verbal y físicamente algunas persona. Han robado sillas de ruedas y tres o cuatro veces las radios con las cuales nos comunicamos con las ambulancias. Si hasta se roban los remedios más baratos" relata un empleado del lugar.
Esto fue corroborado por el jefe del Servicio de Urgencia, doctor Peter Radic quién está hastiado con esta situación al punto de señalar que "ha sido tal el descaro de algunos, que llegan y cargan sus celulares en los enchufes de la sala de espera".
Sin embargo esta situación va más allá y el profesional explica que cuando llegan personas a hacer escándalos se llama a Carabineros pero estos demoran en llegar como media hora y cuando están en el lugar, lo único que hacen es echarlos del lugar pero regresan a los pocos minutos.
"Lamentablemente el hospital no tiene los recursos como para contratar un personal de seguridad. Las personas que trabajamos acá no podemos estar atendiendo a las 300 personas en un día peak y más encima corretear a los vagabundos", dice un molesto jefe de urgencia, según informó el Mercurio de Calama.