La Presidenta asistió a la ceremonia junto a miembros de su gabinete. |
SANTIAGO.- A pesar de que un sector disidente dentro del protestantismo había solicitado a la Presidenta abstenerse de participar del tradicional Te Deum evangélico, Michele Bachelet asistió hoy al evento realizado para conmemorar el aniversario 196 de la Independencia de Chile.
Al servicio de acción de gracias, que se realizó esta mañana en la Catedral Metodista Pentecostal y se extendió por más de dos horas, asistieron las principales autoridades del país, entre los que se contó el ministro del Interior, Belisario Velasco, el presidente del Senado, Eduardo Frei, su par de la Cámara Baja, Antonio Leal, la contralora general (s) de la República, Noemí Rojas, el vocero de Gobierno, Ricardo Lagos Weber y el fiscal nacional, Guillermo Piedrabuena.
A esta lista se sumó el intendente de Santiago, Víctor Barrueto, y los comandantes en jefe de las Fuerzas Armadas y el general director de Carabineros y de la Policía de Investigaciones.
En la celebración, realizada en medio de las manifestaciones en vísperas del 11 de septiembre, el presidente de la Iglesia Pentecostal de Chile, obispo Ulises Muñoz, llamó a la unidad nacional y expresó su deseo de que en el aniversario del golpe militar, "los chilenos salgamos a ocupar las plazas y las calles para saludarnos y no para destruirnos".
Al retirarse de la catedral, la Presidenta se refirió a la ceremonia valorando la petición del obispo Muñoz pues ayuda a que "todos los chilenos podamos vivir mucho mejor" y "estimula el espíritu que a esta Presidenta la anima".
La Primera Mandataria agregó que el mensaje "ha sido muy hermoso y de mucha fuerza y de mucho deseo de que el país avance hacia resolver los problemas que aún tenemos pendiente".
En la oportunidad, las autoridades evangélicas destacaron la mayor prepoderancia que actualmente tiene ese sector en el debate de temas nacionales, tales como la sexualidad y la educación y, aprovechando la presencia de las principales autoridades de la nación, expresaron su deseo de que los niños de esa confesión puedan ser instruidos en su fe en todos los colegios.
Los evangélicos constituyen la minoría religiosa más grande del país, representando el 17% entre los mayores de 14 años.