Los parlamentarios aludidos por Renovación Nacional son el socialista Marco Enríquez Ominami y los representantes del Partido por la Democracia, Laura Soto, Rodrigo González y Marco Antonio Núñez.
Otro de los supuestos implicados en el desvío de platas fiscales a las campañas políticas, el diputado del Partido Radical Social Demócrata por el distrito 15 de San Antonio, Samuel Venegas Rubio, no fue denunciado ya que Renovación Nacional no alcanzó a reunir los antecedentes que permitirían demostrar las supuestas irregularidades.
“Usando como fuente de información la propia página web del Servel, la hemos examinado con cuidado, y hemos podido descifrar anomalías en las candidaturas de Guido Girardo, Alvaro Escobar, Ramón Farías Ponce y Carolina Tohá”, dijo Larraín al presentar el documento ante el Servicio Electoral.
Agregó que “nosotros estimamos que en estas rendiciones de cuentas existen varios delitos posibles, como falsificación de instrumento privado y como falso testimonio, puesto que estas declaraciones son juradas y se presentan ante una representación estatal”.
Consultado por la situación de Lily Pérez y Sebastián Piñera respecto a las facturas emitidas por Publicam, Larraín señaló que este es un “completamente distinta” pues “ellos compraron un cierto servicio, lo recibieron, se constató que el servicio fue prestado y recibieron, cuando pagaron, una factura que resultó ser emitida por una empresa inexistente”.