SANTIAGO.- Las empresas de transporte interurbano Bupesa, Lolol y Marsur, que al momento de ser fiscalizadas no contaban con el dispositivo que controla la velocidad y la jornada de trabajo y descanso de los conductores, fueron clausuradas hoy por Carabineros.
Pese a los reclamos de los administradores, quienes señalaron que los aparatos estaban en proceso de instalación, los efectivos policiales procedieron a bajar las cortinas de sus oficinas comerciales, según informó radio Bío Bío.
El alcalde de Estación Central y presidente de la comisión de transportes de la asociación de municipalidades, Gustavo Hasbún, criticó duramente al Ministerio de Transportes afirmando que no ha cumplido con su tarea fiscalizadora ni se ha preocupado de que la normativa se respete.
"Nosotros vamos a proceder a hacer cumplir la ley que debió haber cumplido el Ministerio de Transportes hace un año y que no la ha aplicado, el ministro de Transportes, el subsecretario en reiteradas ocasiones hablan de la seguridad, de los pasajeros en los viajes interurbanos, sin embargo, jamás se han preocupado de fiscalizar", señaló Hasbún.
Por su parte, Marcos Carter, presidente de la Federación Nacional de Empresas de Buses Interurbanos (Fenabus), se mostró de acuerdo con la medida y afirmó que su gremio no defenderá a ninguna empresa que no cumpla con los dispositivos de seguridad para los pasajeros.