UDI: aprobación del Gobierno se debe a "capacidad mediática" y "presidencialismo"

SANTIAGO.- El presidente de la UDI, Hernán Larraín, junto al senador Juan Antonio Coloma y el diputado Patricio Melero –de la misma colectividad- atribuyeron a la “capacidad mediática” y a la tradición presidencialista del país, el alza de seis puntos porcentuales en la aprobación del gobierno de Michelle Bachelet, con un 52%, reflejado en la última encuesta CEP.

“Yo creo que esencialmente se debe a la capacidad mediática del Gobierno (...) Están todos los días en la televisión, el presidencialismo es una cuestión cultural, por lo tanto los medios de prensa lo reflejan muy fuerte”, expresó el timonel gremialista.

Según Larraín, ésta es una de las principales desventajas que enfrenta la oposición, que –aseguró- “no tiene más exposición que el parlamento”. 

Frente a ello, agregó,  “estamos compitiendo con las manos amarradas, con los pies en un saco y con un antifaz, contra alguien que tiene todos los medios y recursos y todo el respaldo comunicacional”.

Asimismo, Coloma destacó el valor del presidencialismo que existe en Chile con “un deseo común de que al Presidente o la Presidenta le vaya bien”, señalando además que el resultado de la encuesta “tiene una explicación en la lógica presidencial del país y evidentemente en la empatía que ella (Michelle Bachelet) tiene”. 

“La presidenta no tiene de qué alegrarse”

Por su parte, el diputado gremialista Patricio Melero expresó que el alza obtenida en la encuesta entregada esta mañana, no es un motivo de celebración para el oficialismo.

“La Presidenta no tiene de qué alegrarse con su alza, porque contrasta fuertemente con la mala evaluación que la opinión pública tiene de la forma como el Gobierno está enfrentando los temas de corrupción”, señaló el parlamentario.

Según el representante de la Cámara Baja, el 52% de aceptación se debe a que en el Gobierno hay un grupo de personas que se encargan de “blindar” a la Presidenta, y porque la opinión pública “suele no traspasar la responsabilidad a los presidentes y cargar la mano a los funcionarios de menor rango”.