Jorge Tocornal: "No soy pedófilo, nunca he tocado a mis hijos"

SANTIAGO.- El 17 de noviembre del año pasado "El Mercurio" entrevistó en exclusiva al ex empresario Jorge Tocornal. En ella hace sus descargos y asegura ser inocente tras ser condenado a 11 años por violación e inducción a actos de connotación sexual. Éste es el texto completo de esa entrevista. 

En la Cárcel de Máxima Seguridad está detenido el ex subgerente de bancos Jorge Tocornal Babra desde el 4 de noviembre. 

Viste un pantalón gris, una camisa blanca, y está sin corbata, porque se la quitaron en la cárcel. "No me puedo disfrazar de quien no soy. Siempre me he vestido así", afirma. 

Duerme cinco horas, pero dice estar tranquilo, pese a que el lunes pasado [13 de noviembre de 2006] fue condenado -por dos votos a uno- a 7 años de prisión por la violación de su hijo mayor de 11 años, y a cuatro años por actos de connotación sexual con el menor de sus hijos, de 6 años. 

Su tranquilidad, asegura, se la da su defensa -los abogados Luis Hermosilla y Álvaro Morales- en la que confía que revocará el fallo ante la Suprema. 

En exclusiva para "El Mercurio", Tocornal aceptó dar una entrevista de "lo que la prensa no quiere dar porque no vende", señala.

-A sus hijos no los ve desde los primeros días de diciembre de 2005. ¿Qué impresión tiene de ellos? 

"Tengo dos hijos muy distintos. Los sigo queriendo y echando de menos igual que siempre. Pero me he dado cuenta del daño que tienen. Nunca quise creer que existieran manos negras que los manipularan". 

-¿Quiénes? 

"Su hábitat, es decir, su madre y su abuela materna, y yo creo que el padrastro también". 

-¿Tiene antecedentes concretos para afirmar esto? 

"Sí, tengo pruebas de lo hostil que fueron para que yo no viera a los niños. Hace 5 años tuve que recurrir a los juzgados de menores para ver a mis hijos, y gané. Y ahí se perjudicó la relación, se originó una controversia sobre la educación de mis hijos (...) Otra de las cosas por lo que yo creo que hay manipulación es que no corresponde que mi hijo a los 7 años supiera al revés y al derecho la pensión que yo pagaba. Eso no se le ocurrió, eso se lo dijeron".

-¿Sigue sosteniendo su inocencia? 

" Sí, no existen delitos, ni actos parecidos, ni por un segundo los cometí. Y por eso hay una jueza que así lo decidió y me absolvió de todo". 

-¿Entonces su hijo mayor está mintiendo? 

"Sí, miente y lo digo con dolor. Hay una sicóloga cubana, una de las mujeres más inteligentes que he escuchado yo en mi vida, que explicó en el juicio que un niño no mentiroso no necesariamente siempre dice la verdad. A mi hijo mayor le gusta llamar la atención porque tiene falta de afecto entre sus pares, no tiene amigos. Pero en el mismo fallo uno se da cuenta que el niño es capaz de mentir porque dice a una sicóloga de la contraparte que su padre es campeón de pesca y que es millonario. Y usted puede hablar con cualquier amigo mío para ver si me gusta pescar. No he pescado en mi vida, no sé, no me interesa, ni me gusta. Dice que soy millonario y vivo en un departamento de 90 metros cuadrados con crédito". 

-Su hijo lo dibujó como un demonio y lo calificó como su peor pesadilla. ¿Qué piensa? 

"Todavía no sé lo que pasó. Lo que sí le puedo contar es que este mismo tipo de relatos los hizo en contra de su abuela materna y de su madre. Mi hijo vive dibujando demonios porque su juego preferido de Play Station es de puros demonios peleando y tienen doble personalidad (Bloody Roar II). Es un juego muy erotizado. Yo le regalé el juego, pero tengo entendido que ya lo tenía porque cuando lo llevé a la tienda ya sabía de qué se trataba". 

Tocornal pormenoriza lo que él considera conductas impropias de su hijo mayor, como también a sus comportamientos sicológicos -bipolaridad, hiperactividad, déficit atencional y síndromes de Gilles de Latourette y de Asperger- para desvirtuar las acusaciones en su contra. "Creo que fantasea y quiere llamar la atención. Yo jamás he pernoctado solo con mi hijo, siempre ha estado la nana, aunque él dice que esto ocurría cuando ella no estaba". 

-Su hijo tiene lesiones anales. 

"Que tenga una lesión anal no tiene nada que ver que sea cierto de lo que se me acusa. No es lo mismo decir lesión anal que cicatriz antigua, según los peritos. Algunos dicen que es típico encontrar desgarros. Todos los médicos de la contraparte dicen que pudo haber sido un palito, un juguete, o que pudo haber sido un pene. Nadie ha podido afirmar que es un abuso. Ahora yo espero que no hayan sido abusados. La jueza Ocampo (voto de minoría) dice que en el 40% de los casos de niños abusados fueron sus padrastros". 

-¿Usted cree que fue abusado por su padrastro? 

"No, con esto no le estoy diciendo eso. Quiero ser súper serio y hombre en esto. Acá no se trata de que yo voy a buscar otra cabeza porque me están achacando esto a mí. Ahora tampoco lo descarto. Sólo quiero decir que no se investigó". 

-¿Cómo explica el episodio cuando la abuela materna de los niños los ve en una escena de alto contenido sexual? 

"Yo creo que fue sorprendido (el hijo mayor) y la reacción de la abuela fue torpe, porque salió corriendo. Yo hubiese hablado con ellos. El niño se aterrorizó, no quiere más problemas porque le sobran, tiene necesidades afectivas. Esto ocurrió en septiembre de 2005 en el departamento de Reñaca de su abuela materna (...) Yo recién me enteré de esto cuando estaba detenido en la Penitenciaría (diciembre). El niño se sacó los pillos diciendo que yo se lo enseñé y que yo los obligaba a hacer esto en mi departamento con películas pornográficas (...) y que no se lo contara a la mamá para no molestarla". 

-¿Siguió viendo a sus hijos? 

"Sin ningún problema. Cuando fueron sorprendidos por la abuela, nadie me dijo nada. Ni se lo comunicaron a la madre, porque estaba pasando por un mal embarazo. ¿No le parece raro que una abuela que dice ser querendona de sus nietos haya permitido que siguieran viendo a este 'sicópata' tres meses después de lo que vio?" 

Según Tocornal, el relato de su hijo menor -otro de los elementos de prueba para condenarlo- fue 100% manipulado por su madre y su abuela. Dice que su hijo cambió de versión en seis meses. "En enero cuando declaró en la fiscalía dijo que el papá no le había hecho nada". Recién en junio, cuando asistió a la sicóloga del Servicio Médico Legal le dijo: "vengo a contarle cosas de mi papá que son tres. Es que tengo que contarle rápido y ordenado porque o si no no me van a entregar el regalo que está en el auto y me van a pegar un correazo". 

-¿Pudo rehacer su vida después de la separación? 

"Sí, después de la separación tuve dos parejas. Actualmente no tengo pareja". 

-¿Cómo le ha afectado que su sexualidad sea cuestionada públicamente? 

"Me ha molestado porque desde el punto de vista de la sexualidad, cualquier persona que me conozca sabe que siempre me han gustado las mujeres. No soy pedófilo, nunca he tocado a mis hijos, nunca he tocado niños, no toco hombres. Nunca he visto películas extrañas, no tengo amigos extraños, no participo de fiestas extrañas, no tengo problemas de alcohol, de drogas. Soy un tipo más que normal". 

-¿Insistiría en ver a sus hijos? 

"Insistiría, pero de otra forma. No sé con qué me voy a encontrar porque están cada día peor. Yo perdí a mis hijos, lograron su objetivo. Nunca más voy a poder estar solo con ellos".