SANTIAGO.- El intendente metropolitano, Víctor Barrueto, junto al director de la Oficina Regional de Emergencia (Oremi), Johaziel Jamett, y el gerente general de Aguas Andinas, Felipe Larraín, supervisó en terreno las obras y medidas que se están tomando en las ocho comunas de la zona sur de Santiago afectadas a partir de este mediodía por el corte del suministro.
En la ocasión, el intendente aclaró que la interrupción del servicio del agua potable, por obras en la Autopista del Maipo, "no representa ningún tipo de emergencia para la ciudad, es una acción completamente programada y planificada. Aquí hay una coordinación estrecha de Aguas Andina con la Intendencia y los ocho municipios que han participado en esto".
La autoridad metropolitana aseguró que se han tomado todas las medidas "para reducir lo más posible las molestias a la población, previendo todas las dificultades que se puedan presentar".
Al respecto, Barrueto explicó que se han dispuesto camiones aljibes con agua potable en todas las comunas, para estar preparados ante situaciones extremas como es el caso de un incendio.
Según comentó, para estos efectos se ha coordinado el trabajo con bomberos y considerado el uso de agua de regadío.
Debido al corte del suministro, la Intendencia Metropolitana decretó ayer la Alerta Preventiva en toda la provincia de Santiago, más las comunas de San Bernardo y Puente Alto, coordinándose con los comités de emergencia de los municipios afectados, con Aguas Andinas y Bomberos, además de la instauración de un Comité Regional de Emergencia, constituido por la Cruz Roja, la Defensa Civil y Carabineros.
"Debemos entender estos trabajos como una molestia momentánea a cambio de un beneficio importante que va a ser permanente, como ha sucedido con la mayoría de los mejoramientos que hemos hecho para que esta ciudad sea un mejor lugar para vivir", comentó Barrueto tras visitar las obras en terreno.