Marco Cañete, dueño de la Sociedad de Contadores y Auditores de Chile.
Edgar Pinto, El Mercurio.SANTIAGO.- Eduardo Vallejos, abogado defensor de Marco Cañete, dueño de la Sociedad de Contadores y Auditores de Chile (Socogech), dijo que aún no se han podido comprobar que éste cometió el delito de cohecho y afirmó que el caso LAN Chile, que sacó a la luz todos los escándalos de fraude al fisco, no motiva hoy la formalización en contra de funcionarios del Servicio de Impuestos Internos (SII) por esta causa.
En entrevista con Chilevisión, el profesional dijo que a su defendido le imputan cometer "un término de giro de una empresa y que ocupó para ese término algunos contactos del SII, lo que lleva a pensar que él le habría pagado a algunos funcionarios".
Pero precisó que al acusar de cohecho se debe regir por las normas que la fiscalía cita y que en este caso "lo único que no se ha probado es lo que dice el Código Penal, no se ha probado el delito".
"Se han probado cosas y extraído frases de conversaciones telefónicas y por último, algo muy decidor, la fiscalía determina no formular cargos por LAN Chile. El caso que originó este escándalo, no forma parte en este momento y sólo se le acusa de término de giro sugerido", agregó.
Vallejos explicó que con los antecedentes que había, la fiscalía no podía formalizar a su defendido por el caso Lan, "porque la calidad de la denuncia y la poca consistencia en la querella quedaba claro que no había nada".
Con respecto al listado de empresas contribuyentes del SII que Cañete tenía en su poder, el abogado señaló que eso "no significa que fueran clientes de él, pues no tenía acceso directo a ellos", y aclaró que dicha lista se la entregó el ex fiscalizador tributario Javier Mancilla, cuando aún se desempeñaba en Impuestos Internos.
"Está probado que tiene una lista que sólo podía estar en manos del SII y que fue sacada por Mancilla cuando éste aún era funcionario de ahí", dijo.
Vallejos añadió que el listado "no puede ser cohecho" y aseguró que si Mancilla lo sustrajo, "infringió un deber funcionario, ni siquiera es un delito".
Ante las acusaciones de que Socogech sólo era una fachada, el abogado de Marco Cañete afirmó que no era tal.
"Tuvo una estructura real entre los años 2002 y 2003, con más de 200 asociados entre contadores y auditores, tiempo en el que hizo post grados en materia tributaria, con el objetivo de capacitar en esta materia", aseveró.