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Santiago: Jueves 21 de noviembre del 2024 | Actualizado 14:52
Jovino Novoa y Pablo Longueira encabezaron la conferencia en que estuvieron presentes además cinco parlamentarios gremialistas de la Región Metropolitana.
Mario MuñozSANTIAGO.- Se terminaron las vacaciones en la Unión Demócrata Independiente (UDI). Esta mañana, siete parlamentarios gremialistas, encabezados por los senadores Jovino Novoa y Pablo Longueira, hicieron público un documento con doce medidas que consideran claves para la "supervivencia" del plan Transantiago, que se suman a la página web Víctimas del Transantiago y a los fonos de denuncia lanzados el viernes pasado.
Entre los planteamientos (ver recuadro inferior) se contempla rediseñar la malla de alimentadores, para que éstos pasen cerca de hospitales, colegios, servicios públicos -entre otros lugares de alta demanda-; aumentar las frecuencias nocturnas y asegurar servicios, por lo menos hasta la una de la mañana; extender e incentivar la utilización de buses clones del Metro y crear vías exclusivas o segregadas para la circulación expedita de los buses.
El senador Pablo Longueira, anunció que ayer la bancada de senadores de su partido tomó la decisión de solicitar una sesión especial para analizar el plan Transantiago en la Cámara Alta.
Además, el ex timonel del gremialismo aseguró que en el nuevo plan de transportes se ha mostrado "un grado de improvisación jamás visto", debido a que se tuvieron en cuenta criterios políticos y no técnicos al llevar adelante la iniciativa.
"Se usó políticamente, electoralmente y demagógicamente (…) los chilenos podrían haberse evitado todo este sufrimiento si el gobierno no hubiera actuado políticamente, sino bajo criterios técnicos", sostuvo.
A juicio del parlamentario –que aprovechó la ocasión para reiterar sus intenciones de ser el candidato presidencial de la Alianza- no sólo el anterior Gobierno tiene responsabilidad por haber "usado electoralmente el plan Transantiago", sino que la actual administración erró al perseverar en la puesta en marcha del nuevo sistema, pese a contar con informes que aconsejaban no ponerlo en práctica.
1) Rediseñar la malla de alimentadores para que éstos pasen cerca de los lugares con mayor demanda en cada zona: hospitales, colegios, servicios públicos, etc.
2) Establecer recorridos que cubran en forma equitativa todos los sectores de la capital y no darle preferencia automáticamente a aquellos con mayor densidad de población. En aquellas zonas populares donde no sea rentable operar a una mayor frecuencia, el Estado podría subsidiar el servicio.
3) Aumentar frecuencias nocturnas y asegurar servicios hasta por lo menos la 1 a.m.
4) Extender algunas líneas troncales o crear nuevas, de acuerdo a la evaluación que se haga del nivel de satisfacción a las necesidades de la población.
5) Aumentar el horario del Metro con apertura a las 6:00 a.m. y cierre a las 12:00 a.m. y extender e incentivar la utilización de buses clones del Metro para cubrir el exceso de demanda.
6) Habilitar zonas pagas en los puntos de mayor aglomeración para hacer más rápida la validación y el ingreso al bus. Idealmente extender este sistema a todos los paraderos importantes.
7) Construir como mínimo las 36 estaciones de trasbordo prometidas, las cuales no debieran ser sólo un paradero de mayores dimensiones, sino que un sistema inteligente para realizar el cambio de bus en el menor tiempo posible.
8) Las estaciones de trasbordo y las zonas pagas deben ser techadas.
9) Crear vías exclusivas o segregadas para la circulación expedita de los buses y de esta manera recuperar el tiempo perdido en los transbordos.
10) Exigir la instalación y operación de los sistemas de ubicación de los buses (GPS), de comunicación con los conductores y del centro de operaciones del sistema, sin los cuales se hace imposible una adecuada gestión de la flota.
11) Completar el sistema de información a los pasajeros.
12) Revisar los supuestos y estudios que sustentaron el modelo del Transantiago.
