Claudio Huepe.
Héctor Flores, El Mercurio.SANTIAGO.- Tras reunirse por una hora con el canciller Alejandro Foxley, el embajador de Chile en Venezuela, Claudio Huepe presentó su renuncia indeclinable al cargo, tras la polémica que se generó por sus declaraciones sobre la postura chilena en la votación para elegir al miembro no permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
"He presentado mi renuncia indeclinable al ministro Alejandro Foxley porque creo que mis declaraciones provocaron un hecho político que nunca busqué ni pensé que se podía provocar", señaló, leyendo una declaración pública de dos párrafos y sin aceptar preguntas.
Además lamentó el episodio y dijo que espera que con su renuncia se dé por cerrado el tema.
Huepe agregó que la decisión que le transmitió la Presidenta Michelle Bachelet en una conversación privada fue la misma que se dio a conocer públicamente en ese momento, es decir que Chile no apoyaba a Venezuela porque no se produjo un consenso en la región.
Sin embargo, en una entrevista emitida el lunes por el canal Telesur-TV de Caracas, el ex vocero del gobierno anterior afirmó que la Mandataria le señaló que la decisión de abstenerse de apoyar a Caracas fue provocada por el debate político interno.
Bachelet acepta la renuncia
Tras las declaraciones de Huepe, el ministro Foxley salió a confirmar la renuncia del diplomático e informó que ésta fue aceptada por la Presidenta de la República.
"Con esto damos por cerrado el tema", afirmó el canciller, quien tampoco aceptó preguntas.
Indicó que el Gobierno lamenta lo sucedido, ya que el ahora ex embajador estaba haciendo una "buena labor, estaba produciendo un acercamiento entre Venezuela y Chile y habríamos preferido que esto no ocurriera".
"En lo personal lamentó muy particularmente que esto haya ocurrido. Claudio Huepe es un excelente profesional, somos amigos hace muchos años y la actitud que él ha tenido hoy día ha sido muy generosa", agregó.
Asimismo refrendó los dichos de Huepe en cuanto a que Bachelet entregó la misma versión pública y privadamente sobre la votación en Naciones Unidas.
"A nadie escapa que mientras buscábamos el consenso se produjo un debate interno en sectores políticos. Esa discusión fue zanjada oportunamente por la Presidenta en función de una sola consideración: los intereses de Chile", declaró.