SANTIAGO.- Es innegable que tras la tragedia provocada por el sismo y posterior tsunami que afectó a Aisén el sábado pasado, esta localidad ha centrado la mirada de todo Chile como nunca antes había ocurrido.
Así, en cientos de páginas de diarios y revistas la palabra Aisén aparece una y otra vez, relacionada con crónicas de los sobrevivientes, nuevos antecedentes o simplemente imágenes o infografías que dan cuenta de la magnitud del desastre.
Sin embargo, uno de los efectos menos pensados de esta tragedia ha sido la gran confusión que se ha generado sobre si la mencionada zona se escribe con "i" o con "y".
A continuación, dos razones por las cuales Aisén se escribe con "i".
La primera es de autoridad, puesto que el Instituto Geográfico Militar, entidad que sanciona los nombres de los topónimos nacionales, así lo transcribe. Es cierto, sin embargo, que el propio Gobierno en sus páginas no sigue esta autoridad y así uno se puede encontrar indistintamente con las dos versiones.
Asimismo, los habitantes de la zona tienen una predilección por la palabra con "y", quizás porque es la forma más antigua de la palabra. Pero esta no es una razón que invalide la norma.
La segunda razón —y que permite diluir la posible arbitrariedad de la apelación a la autoridad— corresponde a la naturaleza de la ortografía castellana. No hay palabras en nuestra lengua (y que respondan a eso que los gramáticos llaman el genio del idioma) que tengan a la "y" como vocal al interior de una palabra.
Además, si nos fijamos, lo mismo ocurrió con la voz aymará, que la RAE sancionó con la forma aimara. Este es el fundamento de por qué lo hizo. En el caso de las voces provenientes del guaraní se ha conservado la "y" sólo al final de la palabra —Paraguay, Uruguay— y jamás en su interior.