El Gobierno busca incrementar el envío de ayuda a la zona de la catástrofe pra buscara a las víctimas y ayudar a las personas afectadas.
FACHSANTIAGO.- Pese a la petición del senador y timonel de la UDI, Hernán Larraín, de decretar estado de emergencia en la zona de Aisén tras el terremoto del sábado pasado, el vocero de Gobierno, Ricardo Lagos Weber, descartó esta posibilidad aunque informó que por mandato del Ministerio del Interior la alerta temprana decretada en la zona fue cambiada hoy por "situación de emergencia".
El ministro explicó que toda la ayuda que se ha destinado a la región son recursos frescos, es decir, que no han salido de las arcas municipales.
Lagos Weber agregó que "no corresponde decretar zona de catástrofe y estado de emergencia, lo que sí es que se ha instruido a la intendencia regional a cambiar la alerta temprana por una situación de emergencia, lo que puesto en castellano significa que la Intendencia va a tener facilidades para poder disponer de recursos y tomar decisiones a corto plazo, saltándose excepcionalmente algunas restricciones de carácter más burocrático".
En otro anuncio, el portavoz de La Moneda informó que mañana el ministro del Interior, Belisario Velasco, se reunirá con representantes de la industria salmonera para definir las medidas para resguardar la integridad física de los trabajadores, lo que debe ser conciliado con la necesidad que tienen los aiseninos de mantener sus fuentes de trabajo.
"Por eso es que tiene que tener lugar una discusión respecto a qué medidas se tienen que tomar y si esto va a implicar o no mover las jaulas de cultivo de salmón", explicó.
El secretario de Estado dijo que el Ejecutivo está concentrado en darle tranquilidad a la población de Aisén, en llegar con recursos a la zona y en seguir con los operativos de búsqueda de las siete personas que permanecen desaparecidas.
Así desestimó los dichos del alcalde de la comuna, Óscar Catalán, quien calificó de "criminal" la distribución de un folleto en el que la Intendencia de la XI Región aseguraba que no existía peligro de tsunami en la zona. Aunque no lo mencionó, Lagos Weber llamó a "ser más cuidadoso con las palabras".