Nelson Molina, gerente de seguridad de Costanera Norte, plantea que los autos tuneados deben ser sacados de circulación.
El MercurioSANTIAGO.- "No pueden correr así en la vía pública". Así de claro fue Nelson Molina, el gerente de seguridad de Costanera Norte, frente al polémico video que muestra la irresponsabilidad de un conductor que alcanza 280 kilómetros por hora y que ha generado amplias críticas de diversos sectores y una investigación policial.
De acuerdo a Molina, hay dos posibles grupos a los que les gusta correr sus autos en las vías concesionadas: el primero, compuesto por gente que maneja rápido y otro medianamente organizado que se reúne con autos modificados o 'tuneados' para hacer "competencias clandestinas" en un par de kilómetros y luego desaparecer.
Frente a éstos su diagnóstico es claro: "el primer caso está resuelto desde el punto de vista legal", agregando que ya se "han sacado más de tres mil infracciones gravísimas" a aquellos conductores que superan por más de 20 kilómetros el límite de velocidad.
Pero es en el segundo grupo donde Molina cree que existen los mayores riesgos porque "hay un vacío legal", ya que la única posibilidad de arrestarlos es sorprenderlos "in fraganti" y eso –dice- es muy difícil.
Por ello argumenta que hay que sancionar a los que participan en carreras clandestinas aunque no se los sorprenda corriendo. Además, "el que tenga un vehículo preparado debe ser retirado de circulación".
"Si quieren hacerlo -argumenta el gerente de seguridad de Costanera Norte- deben organizarse en un lugar, pero que no pongan en peligro a la gente".