Nicolás Figueroa Serrano declaró que no se acordaba que realizó la llamada.
Mirko Aicon, El MercurioSANTIAGO.- Con firma una vez al mes como medida cautelar quedó Nicolás Ignacio Figueroa Serrano, de 21 años, quien fue formalizado hoy por falsa alarma a organismos de emergencia, tras llamar a Carabineros anunciando que había puesto una bomba en la casa de la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, ubicada en Las Condes.
El hecho ocurrió el 16 de febrero pasado, a las 4:10 de la mañana, cuando Figueroa llamó de su celular y dijo: "Puse una bomba en la casa de la Presidenta, y ella se va a morir".
Tras lo anterior se realizó un intenso operativo de rastreo del artefacto en la casa de calle Burgos –mientras la Presidenta se encontraba de vacaciones en el lago Caburgua- hasta descartar la presencia del explosivo.
A raíz de la investigación, y en horas de la tarde del mismo día, tras rastrearse su número, el individuo fue detenido en su casa, donde según el fiscal Carlos Gajardo, a cargo de las indagaciones, se mostró arrepentido de inmediato.
Por su parte, el imputado aseguró que todo se dio en medio de una reunión con unos amigos y por eso no se acordaba lo que hizo.
En la audiencia de control de detención, que no duró más de 10 minutos, se acordó estudiar una salida alternativa para el joven, que podría ir desde trabajos comunitarios, hasta limpiar las celdas de una comisaría, los que se realizarían durante seis meses.
Según fuentes del caso, el sujeto trabaja en el Hotel Hyatt como botones y estudia para auxiliar de vuelo.
La audiencia, donde se definirán si es o no sometido a trabajos comunitarios, fue fijada para el próximo 17 de junio.