VALPARAISO.- Un llamado a establecer pensiones asistenciales “éticas” hizo el diputado Pablo Galilea (RN), quien dijo que “así como la empresa privada debiera acoger el llamado de la Iglesia a través de monseñor Goic respecto del salario ético, el Estado debiera hacer lo propio con los ancianos más pobres de Chile, que son tal vez las personas más vulnerables, fijando una pensión asistencial ética que les permita vivir en condiciones dignas".
El legislador recordó la solicitud hecha hace algunos años atrás -aprobada en la Cámara de Diputados- en relación a que las pensiones asistenciales de vejez debieran cancelarse con zona en las regiones extremas, por cuanto el alto costo de vida hacen imposible que una persona pueda subsistir con 60 mil pesos.
Galilea agregó que “si a los funcionarios públicos, con justa razón se les paga una asignación de zona por el mayor costo que significa habitar en zonas extremas, con mucha mayor razón se debiera cancelar dicha asignación a la gente de la tercera edad que vive en condiciones de pobreza".
En el mismo sentido, el diputado sostuvo “que se hace necesario ampliar el marco presupuestario, de manera que los adultos mayores que no han podido acceder al beneficio por falta de cupo, puedan hacerlo, dado que todos sabemos que muchos literalmente se han muerto esperando y eso no se condice con la sensibilidad social que debiera existir con los sectores más postergados".
El parlamentario RN indicó que “el número de personas con derecho al beneficio hoy constituyen una cifra marginal respecto del total nacional, lo que es otro punto a favor de esta medida, que podría compensar de alguna manera los altos costos de vivir en una región extrema, a diferencia de otras zonas del país, los gastos por concepto de calefacción, traslados y atención hospitalaria, por nombrar sólo algunas, hacen plenamente justificables la diferenciación en el pago de las pensiones para nuestros adultos mayores".