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Santiago: Sábado 23 de noviembre del 2024 | Actualizado 20:04
SANTIAGO.- Con un emotivo discurso en el que resaltó la labor de Chile para mantener en la memoria el recuerdo de los detenidos desaparecidos y reparar a sus familiares, la Presidenta Michelle Bachelet inauguró el laboratorio de toma de muestras para identificar los restos de víctimas que aún permanecen sin ser individualizados.
En la oportunidad, la Mandataria se refirió a la reapertura de las comisiones Rettig y Valech, que el Gobierno pretende impulsar para reparar a todos los familiares que no fueron considerados en ambas instancias.
Explicó que esto no significa que se busque reescribir los informes, por lo que afirmó que el Gobierno seguirá buscando el acuerdo necesario en el Congreso para sacar adelante el proyecto. Dijo que espera "generosidad y altura de miras" de todos los sectores para ello.
"Creemos necesario que se permita considerar y calificar nuevos casos de violaciones a los derechos humanos que no fueron señalados en su oportunidad. Con ello queremos hacer justicia a personas que por diversas razones no pudieron hacerlo en su momento. No se trata de reescribir informes, ni revisar conclusiones, se trata de hacer justicia en casos particulares, precisos y determinados, en que con nuevos antecedentes se logre llegar a la misma verdad: que determinados chilenos y chilenas fueron víctimas de una violación de sus derechos y merecen una reparación moral y material por parte del Estado", aseguró.
La Mandataria afirmó que las violaciones a los derechos humanos "no admiten prescripción", y en esa línea explicó que con medidas como la anterior, no se trata de abrir heridas, sino de avanzar con la conciencia de que nuestra sociedad dijo "no a la impunidad".
Asimismo, resaltó la importancia que tiene la creación del Instituto de Derechos Humanos, cuya aprobación está en trámite actualmente en el Congreso.
Al respecto, Bachelet manifestó su deseo de que el Parlamento lo apruebe "en un breve plazo", pues se trata de una herramienta necesaria para la promoción y defensa de los derechos humanos y de una respuesta del Estado a este tema "sensible y prioritario de toda sociedad moderna y democrática".
"Por ello creo que no pueden prevalecer consideraciones pequeñas, mezquinas, sectarias o prejuiciosas respecto al instituto y el Congreso ya debería aprobarlo", agregó.
Ayer la Presidenta retiró el trámite de suma urgencia que le había puesto al proyecto de ley que crea esta instancia y que cuenta con una indicación para reabrir las comisiones Rettig (desaparición y ejecutados) y Valech (prisión política y tortura).
La idea del gobierno es logar un acuerdo con la oposición -que el martes pasado cuestionó en el Senado diversos aspectos jurídicos de la iniciativa- y acoger planteamientos de las agrupaciones de derechos humanos sobre el reinicio de las comisiones mencionadas.
La Mandataria resaltó la labor de su Gobierno en materia de derechos humanos justo cuando se conmemora el "Día del Detenido Desaparecido" y en medio del "intenso lobby" que despliega el Ejecutivo para lograr un escaño en el Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, donde compite con Venezuela.
Precisamente en el discurso de hoy, la Jefa de Estado aprovechó de destacar el compromiso de su administración sobre el tema a nivel internacional.
Afirmó que una "dimensión importante" en la mirada de su Gobierno acerca de los derechos humanos "es el ámbito de la cooperación internacional, para su ejercicio, garantía y protección".
En ese sentido, señaló que "nuestra historia reciente, nuestras convicciones democráticas y el compromiso con los derechos humanos que hemos consolidado en nuestro país nos obliga a hacer realidad la ratificación de la Corte Penal Internacional y al mismo tiempo impulsar y dar las urgencias necesarias a la tramitación de los demás instrumentos internacionales de derechos humanos, que perfeccionan el sistema internacional de protección de los derechos humanos, junto con participar activamente de toda iniciativa que en el terreno internacional se haga en la materia".
Garantizó además que "Chile ha sido históricamente pionero en las causas humanitarias" y bajo su Gobierno "lo seguirá siendo".
