TALCA.- Una crisis de pánico, con espasmos y un temblor irresistible en las manos, sufrió el cabo segundo de Carabineros Juan Carlos Betancourt, cuando participaba en la reconstitución de un violento incidente ocurrido el 2 de julio pasado, cuando fue golpeado junto a su pareja policial por 15 sujetos ebrios.
A raíz del ataque, el sargento Arroyo tuvo que disparar al aire para reprimir a los agresores, pero no pudo evitar que su subordinado sufriera el robo de un arma y bastón utilizado para procedimientos policiales.
Por estos hechos, el cabo Betancourt sufrió un traumatismo que obligó a su traslado al hospital institucional en Santiago, retornando sólo hace quince días a su trabajo en el retén Queri, en la comuna de San Clemente, según consignó El Centro.