Javier Cárdenas fue trasladado esta mañana desde el cuartel del OS 9 hasta el Centro de Justicia para ser formalizado.
Raúl MaldonadoSANTIAGO.- Utilizando al menos 12 tarjetas que había clonado gracias a la base de datos de 19.195 clientes que logró reunir mediante sus conocimientos como ingeniero civil informático y su puesto laboral en Transbank, Javier Eduardo Cárdenas Foitzick (43) seguía una "ruta de defraudación", en la que elegía diez horarios y establecimientos que en la semana presentaran ciertas debilidades de seguridad -donde había cajeros automáticos para sacar dinero- y realizaba giros diarios de $400 mil pesos en promedio.
De este modo describe el general el general Raúl Arellano, director de Drogas y Prevención Delictual de Carabineros, el modus operandi que siguió quien es sindicado como el autor y protagonista de la estafa de más alta proyección en la historia policial del país, y que ayer fue detenido gracias a una investigación de nueve meses desarrollada por el OS9 de Carabineros, en conjunto con la Fiscalía Centro Norte y Transbank.
"A lo menos tenía 12 tarjetas que en esta confección con la base de datos puede dar margen a ser utilizada seis, siete veces u ocho como máximo", señala el jefe policial. En el mismo "plástico", Cárdenas iba alternando los distintos números de tarjetas y las claves que establecía gracias a los programas que él mismo había acondicionado, en base a sus conocimientos informáticos y al acceso a información privilegiada que tuvo como parte de su cargo en Transbank.
"Él podría haber seguido desarrollando su actividad por mucho más tiempo si no hubiese sido sorprendido o identificado", advierte el general Arellano.
Pero sí fue encontrado y gracias a la investigación desarrollada hay evidencia que según la policía, la fiscalía y la parte querellante, demuestra que él es hasta ahora el único responsable de la millonaria estafa.
Parte de esas pruebas son las filmaciones donde Cárdenas aparece realizando transacciones con tarjetas ajenas a su propiedad. Ello, según explica el jefe policial, se comprueba al cruzar datos y establecer que "el día en que utiliza la tarjeta figura una tramitación en Transbank, con el nombre de determinada persona o a lo menos con el número de cuenta asignado a la persona, y que no es precisamente la persona que efectúa la transacción".
"Todo eso permite situarlo (a Cárdenas) en un momento, con una tarjeta que no es de su propiedad y con un usuario real que está en otro lado", concluye el general.
Hasta ahora Carabineros tiene un registro de los números de las cerca de 20 mil tarjetas que Cárdenas poseía en su base de datos, y tras sus análisis, tiene certeza de que cada uno de estos correspondía a una persona diferente.
Según revelaron fuentes policiales, Cárdenas vivía en un sector acomodado de la comuna de Peñalolén, en una casa cuyo valor se estima en más de 4 mil UF, es decir, cerca de 76 millones de pesos.
Además, el ingeniero civil informático se había comprado una lancha y un auto de 22 millones de pesos.