SANTIAGO.- "Yo estuve en el centro hoy día, y me parece que la situación de los jóvenes es bastante delicada", reconoció ayer el encargado del área de Derechos del Fondo de Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), Miguel Cillero, después de visitar el recinto "Tiempo de Crecer", del Sename, donde el domingo pasado murieron ocho menores producto de un incendio, a los que ayer se sumaron dos nuevas víctimas.
Siguiendo la línea manifestada por la entidad ayer a través de un comunicado -donde pidió al Gobierno medidas "urgentes" para garantizar la seguridad de los menores- el profesional afirmó que "nos parece fundamental que exista un reforzamiento del equipo sicosocial" que atiende a los jóvenes, sumando también un trabajo con los funcionarios.
Así se lo manifestó a la subsecretaria de Justicia, Verónica Barahona y al director nacional del Sename, Eugenio San Martín, con quienes se reunió en Puerto Montt.
A juicio de Cillero en la zona siniestrada es necesario hacer una "intervención en crisis especializada".
"Es decir, no basta con hacer más de lo mismo, porque, primero, no funcionó y segundo, porque ha ocurrido un hecho muy lamentable que produce por supuesto un impacto muy fuerte en la conciencia de los jóvenes", precisó el abogado en conversación con Emol.
Aunque reconoció que episodios como lo ocurrido en la Región de Los Lagos tienen un grado de "excepcionalidad", el profesional también advierte que en Unicef "creemos que hay problemas en el sistema que han quedado en evidencia y que el propio ministerio ha reconocido, para asegurar una convivencia interna pacífica y que se cumplan los fines de la ley".
Rehabilitación: Pretensión "demasiado ambiciosa"
Miguel Cillero advirtió que frente a episodios lamentables como el que acaba de ocurrir en Puerto Montt la gran promesa del nuevo sistema de rehabilitar y reintegrar socialmente a los menores termina convirtiéndose en algo muy difícil de concretar.
"La verdad es que hablar de rehabilitación e integración social parece ser una pretensión demasiado ambiciosa, yo creo que en este minuto hay que concentrarse en efectivamente la convivencia al interior no se transforme en una amenaza a la vida e integridad física o síquica de los internos, eso es lo primero", sentencia.
"Creo que el problema, lamentablemente hoy día está en una vara más baja", añadió el representante de Unicef, entidad que como miembro de la comisión de expertos que analizó la puesta en marcha de la Ley de Responsabilidad Penal Juvenil siempre se opuso a que ésta partiera sólo con las condiciones "mínimas" para su funcionamiento.
En el organismo dependiente de Naciones Unidas confían en que la situación mejore con la puesta en marcha de las comisiones regionales para la supervisión y monitoreo de los centros de privación de libertad -instancias contempladas en la ley e integradas por actores de diversos sectores, incluida la Unicef- que debería producirse en el corto plazo.
"Siempre es posible que se tomen ciertas medidas para prevenir hechos que están dentro de lo probable, y fundamentalmente eso tiene que ver con procedimientos eficaces de apagar incendios, o mecanismos de sacar humo de lugares cerrados, lo segundo es que nosotros consideramos que estas comisiones que generó el reglamento, en la medida que funcionen adecuadamente en todo Chile podrían ayudar también a advertir sobre algunas insuficiencias que podrían llegar a generar situaciones riesgosas".
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Episodio puntual o evidencia que el sistema partió con problemas que ustedes advirtieron desde antes:
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