SANTIAGO.- La Iglesia Católica resaltó la importancia del diálogo como vía substancial para concretar acuerdos y solucionar conflictos en el país, al concluir la 94ª Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal (Cech), realizada esta semana en Punta de Tralca, región e Valparaíso, con el propósito definir el lineamiento que seguirá la institución durante los próximos cinco años.
"En el último tiempo, pequeños y grandes acuerdos en distintos planos de la vida social nos han confirmado que el diálogo es el principal camino para la solución de conflictos y para fortalecer los liderazgos en la participación y corresponsabilidad social", indicó la Iglesia mediante una declaración , dada a conocer por el reelecto presidente de la (Cech), Monseñor Alejandro Goic, y el secretario general, Monseñor Cristián Contreras Villarroel.
En esta línea, destacó el acuerdo alcanzado para llevar a cabo la reforma educacional, que se concretó "con el respaldo de un abanico amplio de miradas", tal como "los esfuerzos desplegados para solucionar de modo pacífico conflictos internacionales, laborales y políticos".
Por el contrario, cuestionó la actuación de las autoridades sanitarias respecto de la píldora del día después, señalando que "cada vez que se imponen medidas unilaterales frente a asuntos de interés público, como por ejemplo algunas políticas emanadas de la autoridad de salud, resultan contra la ciudadanía, que es la principal perjudicada por atentar en contra de la sexualidad humana y la familia".
La Iglesia lamentó además la violencia contra la mujer y al interior del hogar evidenciada especialmente durante el último año, indicando que "de un modo especial nos duele y alarma las situaciones de violencia que se generan al interior del hogar (...) las historias de mujeres golpeadas por aquéllos que les han jurado amor son una luz de alerta para los indicadores de nuestro 'desarrollo'".
En este sentido, el documento expresa la "profunda tristeza" de los obispos ante lo que consideran una "persistente actitud atentatoria contra la vida humana", por lo que llaman a las autoridades de Gobierno y parlamentarios a que "acojan y protejan la vida desde su concepción hasta su muerte natural".