SANTIAGO.- Como un país dormido que necesita ser "remecido" por la Alianza, describirá a Chile el presidente de la Unión Demócrata Independiente (UDI), Hernán Larraín, durante su exposición de este mediodía ante el Council Of The Americas, en Nueva York, entidad que visitó la Presidenta Michelle Bachelet en septiembre pasado.
El senador, apuntará a las dificultades que su juicio enfrenta el país debido a la escasez de reformas sustanciales, al estancamiento en el nivel de desarrollo, que según dice en su intervención hizo que el país se quedar "sólo en la primera fase, de exportar productos, exportar nuestras materias primas, y no se agregó inteligencia".
Si bien el timonel reconoce que Chile durante los primeros gobiernos de la Concertación, "tuvo un periodo de crecimiento", agrega que "luego por distintas razones se estancó, y este estancamiento es lo que algunos llaman Chile se quedó dormido".
"Chile está durmiendo una siesta, y esta siesta está causando una pérdida de oportunidades para salir del subdesarrollo, para alcanzar el bienestar en la mayor cantidad de habitantes para lograr el pleno desarrollo. Esa es una oportunidad de tiene Chile, y la Alianza lo que quiere es remecer a Chile, despertar a nuestro país para lograr salir de este marasmo, de este estado de embotamiento, de esta siesta que ya se empieza a prolongar demasiado", sentencia.
Las dificultades vienen porque, por un lado, nuestro Gobierno no ha hecho reformas sustanciales prácticamente en ningún ámbito, porque no se siguió avanzando en el nivel de desarrollo y se quedó sólo en la primera fase, exportar productos, exportar nuestras materias primas y no se agregó inteligencia, no se vendió la capacidad de hacer cosas que tiene Chile, no se vendieron servicios, y eso ha topado por lo tanto el ritmo de desarrollo, incluso hay quienes en el propio Gobierno dudan del modelo económico que se ha seguido, lo que sumado a la falta de dar pasos fuertes ha limitado nuestra capacidad de crecimiento.
Sin embargo, la otra complejidad que hemos expuesto es que la coalición de Gobierno, la Concertación como tal, se ha deteriorado, se ha descompuesto, está gastada, sin ideas, sin propuestas nuevas, sin liderazgo, sin conducción, y eso hace que nosotros tengamos que asumir como Alianza un tremendo desafío. Estamos desde ya apoyando, en aspectos específicos como la educación o la seguridad pública, para que no se caiga el sistema, pero creemos que llegó la oportunidad de este sector y estamos preparándonos para gobernar, remecer al país y sacarlo de esta siesta y abrir oportunidades para que Chile nuevamente vuelva a recuperar su camino.
De esto es lo que hemos hablado para atraer inversiones para despertar nuevamente el interés por Chile y no empezar a ser desplazados como una economía que empieza a seguir un ritmo mediocre, como nos ha ocurrido en estos últimos años. En ese propósito hemos estado conversando con muchos empresarios y dirigentes gremiales en estas visitas, y estamos seguros que vamos a tener un vuelco en la mirada hacia Chile porque se va a recuperar el optimismo, optimismo que lo da la Alianza.