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Santiago: Domingo 20 de octubre del 2024 | Actualizado 12:06
SANTIAGO.- Arriba de una bicicleta y vestido con una parka verde, el edil de La Florida y candidato a alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett (UDI), lanzó esta mañana su campaña municipal, una hora antes que su contendor, Jaime Ravinet (DC).
La jornada, que incluyó un recorrido en bicicleta por algunos sectores de la comuna de Santiago, terminó en la feria de Ricardo Cumming con Martínez de Rozas, ahí se encargó de destacar las diferencias que tiene con su adversario.
“Yo soy un alcalde actual, vigente. Él es el acalde de la Concertación, de un proyecto que va fracasado. Él es el alcalde del Transantiago; él fue ministro de Vivienda, por lo tanto tenía que haber hecho las calles y los paraderos y no los hizo, por lo tanto, también es un alcalde fracasado”, enfatizó Zalaquett.
En este marco, el alcalde de la Florida, criticó la Plaza de Armas y la calificó como una de las peores de Santiago. “Él la hizo, mató Santiago desde su esencia, desde donde nace”, dijo Zalaquett.
En su recorrido, también le respondió a Ravinet, quien minutos antes había dicho que él jugaba de local y el resto de los candidatos, de visita.
“Yo vengo a trabajar con los santiaguinos de corazón y no a ocuparlos para llegar a La Moneda, que es muy distinto. No soy de visita, la visita es él (Ravinet), que viene a usarlos de paso”, declaró Zalquett.
Además, declaró que no sólo será el alcalde del Bicentenario, sino que de los próximos ocho años, ya que “yo me vengo a quedar”, dijo Zalaquett.
Respecto a las expectativas que tiene del resultado de las municipales, el edil comentó que le próximo 26 de octubre los santiaguinos tendrán que optar entre un alcalde del siglo XXI o uno de los noventa.
“Santiago va a tener que elegir si quiere mirar para adelante, si quiere un alcalde del siglo XXI (...) o un alcalde de escritorio que en el fondo dice que no va atacar, pero siempre tiene la carta debajo de la manga”, afirmó Zalaquett.
Pablo Zalaquett, al igual que Jaime Ravinet, respaldó la medida que adoptó el liceo Darío Salas, de cancelarle la matrícula a María Música Sepúlveda, la joven que le lanzó un jarro de agua a la ministra de Educación.
También coincidió en que la joven debería haber mostrado algún gesto de arrepentimiento. “Me hubiera encantado que ella se arrepintiera y pidiera perdón, ya que esto habría quedado como un tema de un momento de pasión”, dijo el alcalde.
En este contexto destacó que sucedió lo contrario. “Ella se jactó de este hecho y dio a entender –ella y su madre- que quedaron cortas, en el sentido que debió haber hecho más, que fue poco”, dijo Zalaquett.
