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Santiago: Domingo 20 de octubre del 2024 | Actualizado 12:06
SANTIAGO.- Como un "obstáculo" a la integración entre ambos países calificó el ministro vocero de Gobierno, Francisco Vidal, la decisión del Presidente de Bolivia, Evo Morales, de restringir el ingreso a sus mercados de vehículos con una antigüedad mayor a cinco años, lo que implica un duro golpe especialmente al negocio automotor de la Zona Franca de Iquique (Zofri).
"Ya sea por parte de Chile o de Bolivia, en este caso, cualquier cosa que sea un impedimento para que las personas, las ideas y el comercio fluyan entre uno y otro país, es obstáculo", afirmó el portavoz de La Moneda al ser consultado si el decreto promulgado por Morales interfiere en la integración de los pueblos.
Vidal sostuvo que la medida "está afectando básicamente a grupos en Bolivia e indirectamente a personas en Chile, lo que demuestra una vez más que la integración ayuda a tener menos problemas y que cualquier obstáculo a la integración aviva los problemas".
Luego que ayer una persona muriera en las violentas protestas y bloqueos registrados en las carreteras bolivianas en rechazo a la decisión de Morales, el ministro expresó los deseos del Gobierno chileno de que "no hayan manifestaciones, menos con incidentes lamentables y ojalá se resuelva".
La Zofri vende a Bolivia US$ 300 millones al año en autos usados y genera 13 mil empleos, los que hoy están en riesgo.
El decreto también afecta a Arica, que recién intentaba sumarse al negocio amparada en la Ley Arica de 1995, creada para impulsar su desarrollo, y donde existe un flujo importante de vehículos que se descargan en el puerto para ser importados a Bolivia directamente desde sus países de origen.
El impacto también alcanza a las zonas francas bolivianas de La Paz, Santa Cruz, Cochabamba y Oruro, donde 15 mil trabajadores viven del comercio y de las actividades ligadas al cambio de automóviles.
Las autoridades de ese país explicaron que la política impulsada por el Mandatario busca hacer frente al crecimiento "descontrolado" del mercado automotor y evitar que Bolivia se convierta en un "depósito de chatarra".
