Médico afirma que Felipe Cruzat está en una situación de desesperación

SANTIAGO.- Cuarenta y ocho días lleva Felipe Cruzat, de 11 años, internado en el Hospital Clínico de la Universidad Católica, a la espera de un corazón que le permita seguir viviendo. Hoy, su médico tratante, Gonzalo Urcelay, afirmó que el menor "está en una situación de desesperación" y que "cada día es más difícil mantenerlo como está".

Gonzalo Cruzat, padre de Felipe, confirmó lo dicho por el médico, y afirmó que su hijo está "en una condición un poco más frágil", y que "su mente de niño se da cuenta de que la cosa se está complicando".

Felipe sufre una miocardiopatía dilatada, enfermedad que provoca una dilatación progresiva de su corazón, con lo que éste pierde la capacidad de contraerse y la circulación de sangre a los otros órganos se va deteriorando.

"Ha tenido algunos eventos de desesperación y de angustia. Ha tenido momentos en que se ha tratado de sacar las sondas y los catéteres, donde es conveniente mantenerle las manos un poquito amarradas a la cama, para que no pueda hacerse daño", señaló Gonzalo Cruzat.

La posibilidad de conectar a Felipe a un ventilador mecánico, evidencia que su situación "ha tenido un deterioro general", según afirmó el doctor. "Si él tiene un deterioro progresivo que afecta al pulmón y que respirar se le hace imposible, vamos a tener que conectarlo a ventilación mecánica (…) eso para un niño, en las condiciones de él (Felipe) es una situación que hace que lo que viene después de eso, es más complicado".

"Por ahora, él puede respirar por sí solo, mantiene una buena oxigenación y es capaz de intercambiar los gases que tiene que intercambiar, pero, obviamente, en la medida que el tiempo pasa, esto se va hacer más difícil", afirmó el doctor, agregando que aún no hay daño en ningún otro órgano.

La confianza de "Felipito" y de los Cruzat Solar

Gonzalo confirmó que la confianza de "Felipito" en que llegará un corazón permanece más o menos intacta. "Siempre le preguntamos si está con energía para seguir esperando, y él dice que sí, que tiene energía, aunque ocasionalmente dice que no", relató.

Tantas ganas tiene Felipe de levantarse que su padre afirmó que "ha preguntado por el tema del colegio, que no quiere perder clases. Por broma le dijimos 'ya po, te vamos a tener que traer los libros para acá' y dijo 'ya bueno, tráiganmelos'. No tiene ninguna posibilidad de la verdad de poder concentrarse...apenas puede comunicarse".

El matrimonio Cruzat Solar afirmó que "hemos estado tranquilos, sabiendo que todo va a terminar bien, pero lógicamente, tenemos claro que los riesgos son altos y que cada vez la probabilidad del trasplante son menores, porque la condición de Felipe ya no es la misma".