SANTIAGO.- La ministra de Educación, Mónica Jiménez, descartó esta mañana que la muerte del estudiante del Internado Nacional Barros Arana (INBA) C.D.D., de 16 años, haya ocurrido por un problema de infraestructura en el establecimiento y aseguró que no hay terceros involucrados en el hecho.
La secretaria de Estado dio el pésame a la familia del menor y agregó que durante su visita al colegio visitó "el lugar donde fue encontrado muerto y todo indica que fue un accidente".
Jiménez agregó que los compañeros de curso están siendo tratados por una sicóloga, mientras que pidió a la Universidad de Chile que envíe hasta el internado siquiatras expertos en adolescencia.
El menor fallecido pertenecía a un programa de la Municipalidad de Santiago, llamado Centenario, que, según la ministra, consta de 400 becas para alumnos que cuenten con excelencia académica y que provengan de regiones, de las cuales sólo están siendo utilizadas 200.
En tanto, el director del establecimiento, Juan Yáñez, ratificó que el menor tenía excelentes notas, que era un alumno normal, aunque con una personalidad un poco retraída.
El directivo agregó que el hecho ocurrió a las 21.45 horas de ayer, y que los estudiantes tienen permiso para estar levantados hasta las 22 horas, por lo que no hay nada raro en que haya estado fuera de su dormitorio a esa hora.
Las declaraciones de la ministra se registraron tras una reunión, de poco más de una hora, con el director del establecimiento, la presidenta del centro de padres y apoderados, Amalia Bravo, y los profesores más cercanos al escolar.