SANTIAGO.- Hasta dos semanas Felipe Cruzat podría permanecer en la sala de recuperación de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Clínico de la Universidad Católica, tras la operación a la que fue sometido para implantarle un corazón artificial.
La intervención se prolongó por cerca de 12 horas y el equipo médico estuvo integrado por el cirujano cardiovascular, Rodrigo González, el jefe de cirugías cardiovasculares, Ricardo Zalaquett y el jefe de trasplantes cardiovasculares, Pedro Becker. Además, participaron cinco e especialistas argentinos, quienes se turnaron durante la operación, entre ellos, el médico Gerardo Naiman.
“Tuvimos una intervención con un equipo médico muy preparado y conciente de lo que había que hacer”, dijo Naiman.
El especialista argentino comentó que ya han trasplantado a 10 pacientes bajo el mismo sistema que a Felipe Cruzat, y todos han tenido la misma evolución.
“Son cirugías que deben programarse y preparase porque son muy largas (…). Los primeros días requieren muchos cuidados, hasta que todo el organismo está adaptado a este corazón artificial”, dijo Naiman.
Además, precisó que los niños que han tenido este tipo de intervención, nunca dejan de estar bajo una terapia, ya que “tienen que convivir y aprender a vivir en un espacio reducido, con un corazón artificial, tratando de llevar una vida de buena calidad, pero con mucho cuidado a la espera del donante”.