SANTIAGO.- La familia del fallecido ex martillero público Fernando Oliva manifestó su satisfacción y tranquilidad tras conocerse las condenas a doce años de presidio al chofer y al ex guardaespaldas de Gerardo Rocha, por su participación en la muerte del ex martillero, en febrero de 2008 en El Quisco.
"Hemos estado abierto a conversar, al perdón, a todo. Para nosotros es una lucha constante y espero que estos capítulos dolorosos se vayan cerrando. Nuestro deseo es estar tranquilos como familia", señaló el hijo de Oliva, Jaime Oliva Lavanderos, consignó radio Cooperativa.
El Tribunal Oral en lo Penal de San Antonio condenó ayer a doce años de presidio a César Osores y Marcelo Morales –ex guardaespaldas y chofer de Rocha– como autores del homicidio calificado de Fernando Oliva.
Las familias de los condenados también valoraron la sentencia. En tanto la fiscalía, pese a que había solicitado la pena de presidio perpetuo calificado, se declaró satisfecha con la decisión del tribunal.