María Yaneth aseguró que su hijo Joel no era un mal muchacho, pero admitió que éste tenía problemas conductuales y de drogadicción.
Alex Valdés, El MercurioSANTIAGO.- Con los ojos cansados por el llanto constante desde que se desató la tragedia que cambió su vida para siempre, María Yaneth Sánchez Inostroza (35) recibió hoy en exclusiva a "El Mercurio", en las dependencias de la funeraria "Sendero de Cristo", en la comuna de Independencia, para hablar de la muerte de su hijo Joel Cancino (17) a manos de su hermano Javier de 15 años, el pasado lunes.
El hecho ocurrió pasadas las 14 horas del lunes, cuando Javier se encontraba en el departamento de la población Juan Antonio Ríos, acostado en la cama de su madre, María Sánchez, y llegó Joel. En ese momento, ambos discutieron por quién se quedaba en el lugar. Joel salió del dormitorio para buscar un cuchillo, que Javier luego le arrebataría y clavaría en la parte baja de la espalda, en medio del forcejeo, causándole la muerte por una anemia.
"Este momento lo vivo con mucho dolor. Uno piensa en estos minutos el cómo haber hecho más. Uno siempre quiere evitar que estas cosas pasen, que un hecho así no se dé en ningún hogar, en ninguna familia. Yo amo mucho a mis dos hijos y quiero el bien para los dos. Uno que descanse en paz, tranquilo. Y al otro tratar de ayudarlo para que logre sobrepasar todo esto y salir adelante, porque él es de verdad un buen cabro. No es alguien que tuviera malos hábitos, es de la casa, tranquilo", aseguró entre lágrimas y acompañada de su hermana Patricia.
La madre de víctima y victimario añadió que lo ocurrido se trató de un error, que su hijo menor nunca tuvo la intención de matar Joel.
"Eso ya está demostrado por exámenes del médico legal. Lo entregaron ayer y el resultado es que él (Joel) tuvo desde el lado izquierdo una punzada producto del forcejeo, por lo tanto no hubo intención de Javier de agredirlo por la espalda, como se especuló, y matarlo porque eso lo desmiente absolutamente el Servicio Médico Legal. Fue un accidente del altercado que ellos tuvieron, donde penetró la punta del cuchillo en el "Jo" (Joel), y lamentablemente fue letal, pero no había intención", sostuvo.
Si bien María Yaneth aseguró que su hijo Joel no era un mal muchacho, sí admitió que éste tenía problemas conductuales y de drogadicción, y que tuvo varias peleas con Javier antes del día lunes.
Agregó que tras el funeral de su hijo, que será mañana en el Cementerio General, se irá de su actual hogar y que buscará apoyo sicológico para Javier, que ayer quedó con reclusión nocturna domiciliaria, lo que le permitirá continuar con sus estudios.
Lea la entrevista completa en la edición de mañana en "El Mercurio".