EMOLTV

Colombiano acusado de asesinar a menor chilena en España enfrenta 17 años cárcel

Se trata del presunto culpable de la muerte de Fernanda Fabiola Urzúa, de 15 años, quien desaparecido el 26 de julio de 2007 en la isla de Tenerife, en el archipiélago de las Canarias.

10 de Mayo de 2009 | 07:41 | EFE

SANTA CRUZ DE TENERIFE.- Un jurado popular decidirá a partir de mañana lunes en la Audiencia Provincial de Santa Cruz de Tenerife sobre el asesinato, en 2007, de la niña chilena de 15 años Fernanda Fabiola Urzúa, para cuyo presunto asesino el fiscal pide una pena de 17 años y seis meses de prisión.


El colombiano Héctor Fabio Franco Giraldo, de 30 años, es el presunto autor de la muerte de la que joven y se encuentra en prisión desde el 4 de agosto de 2007, dos días después de que fuera hallado el cadáver de Fernanda Fabiola Urzúa.


La niña chilena había desaparecido el 26 de julio cuando se dirigía a su casa, en la urbanización Ten-Bel, un enclave turístico de Arona, al sur de la isla de Tenerife, en el archipiélago de las Canarias.


El cadáver de Fernanda Fabiola, de nacionalidad chilena, fue encontrado a poco más de un kilómetro de donde fue vista por última vez, enterrado en una finca cercana a un cruce de carreteras.


El descubrimiento del cuerpo fue posible por la confesión del joven colombiano, que indicó el lugar tras varias horas de declaración en los Juzgados y después de que se estableciera un gran dispositivo de búsqueda de la niña.


Héctor Fabio Franco Giraldo tenía antecedentes por delitos sexuales cometidos en la isla española y es el único detenido por este caso, aunque en un primer momento se tomó declaración a otro posible sospechoso, que finalmente fue puesto en libertad.


Cuando desapareció, la menor se dirigía desde el barrio de El Fraile, donde había visitado a unas amigas, hasta su residencia y para acortar esta distancia decidió ir por un camino de tierra en el que presuntamente fue secuestrada y posteriormente asesinada.


Sólo se encontraron dos pistas en un camino de tierra que fueron reconocidas por los padres de la desaparecida, una zapatilla de playa y un cinturón.


Casi un centenar de personas, entre agentes de la Guardia Civil, Policía Local y vecinos buscaron a la joven tras su desaparición y al rastreo se sumaron 97 militares, además de cuerpos especiales, unidades caninas y dos helicópteros.


El funeral por la joven chilena fue oficiado por el obispo de Tenerife, Bernardo Álvarez, el 18 de agosto de 2007 en el pabellón polideportivo de El Fraile y a las honras fúnebres asistieron los entonces embajadores de Chile y de Colombia en España, Osvaldo Puccio y Noemí Sanín, respectivamente.

EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?