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Madre de chilena asesinada en Tenerife lamenta que su hija tomara ruta prohibida

Fabiola Marín entregó hoy su testimonio en el juicio que se sigue contra el acusado Héctor Franco.

13 de Mayo de 2009 | 15:50 | Jessica Von Burucker, Televisión Canaria

SANTA CRUZ DE TENERIFE.- Un breve testimonio que no se extendió por más de cinco minutos, entregó hoy Fabiola Marín en el segundo día del juicio por el asesinato de su hija Fernanda Fabiola Urzúa en Tenerife, hecho del que está acusado el colombiano Héctor Fabio Franco Giraldo.


La audiencia comenzó alrededor de las 09:30 horas locales y cerca de 45 minutos después la madre de la adolescente chilena llegó para ser interrogada sobre su hija. El juicio fue entonces interrumpido para que la mujer no tuviera que esperar y pudiera entregar su declaración en forma inmediata.


Visiblemente afectada por tener que revivir los hechos que rodearon la muerte de su hija, Fabiola Marín relató que Fernanda Fabiola era una niña normal de 15 años, tranquila y obediente como cualquier adolescente de la misma edad.


La mujer agregó que no podía entender por qué la noche del 26 de julio de 2007 la joven tomó el atajo de tierra -en el que fue abordada por Franco Giraldo- para regresar a su casa, si lo tenía absolutamente prohibido, afirmando que se quedará para siempre con esa incógnita.


Tras entregar su testimonio, Fabiola Marín se retiró rápidamente de la sala y fue seguida por todos lo medios de prensa que se encontraban en el lugar. Sin embargo, sólo pudieron captarse imágenes de la mujer caminando, ya que previamente ella había dicho que no realizaría declaraciones.


Estaba previsto que durante la jornada de hoy también fueran exhibidas fotografías del estado en que quedó el cuerpo de Fernanda Fabiola tras el crimen. Sin embargo, finalmente se decidió que las crudas imágenes sólo serán vistas por el jurado antes de entregar su veredicto.


En tanto, durante la jornada de mañana entregarán su testimonio el padre de Fernanda Fabiola, Sergio Urzúa, y los médicos forenses que examinaron el cadáver de la joven.

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