La diputada estará en Chile entre el 9 y el 12 de junio, oportunidad en la que espera entregar más antecedentes respecto al caso.
El MercurioSANTIAGO.- A dos semanas de arribar a Chile para entregar su testimonio a la Comisión Investigadora del Caso Mirage, la diputada belga Juliette Boulet, quien interpeló al ministro de Justicia de su país tras conocerse las irregularidades en la venta a Chile de los 25 cazabombarderos en 1994, asegura que los gobiernos de la época son los responsables de las anomalías, al tiempo que adelanta que espera aportar importantes datos para la investigación.
La parlamentaria, quien estará en Chile entre el 9 y 12 de junio, afirma vía telefónica a Emol que en su país no hay voluntad política para reabrir el caso -ya prescribió según las leyes belgas- aunque precisa que las diligencias que se lleven a cabo en Chile pueden ayudar a que se reanude el proceso judicial en su país.
Asimismo, Boulet precisa que si el caso Mirage no alcanzó en Bélgica las dimensiones que tiene en Chile, sólo se debe a que fue "ahogado" por un episodio de mayor envergadura, el llamado "Caso Augusta", una venta irregular de helicópteros que involucró a muchos políticos importantes de los años '90.
-¿Por qué considera que es importante que se reabra el caso en su país?
"Para el caso Augusta, de hecho, sí hubo un procedimiento judicial, hubo sentencias, condenas, pero para el caso de los Mirage jamás hubo condenas judiciales, por eso que sería importante hacerlo".
-¿Qué antecedentes tiene respecto a pagos irregulares en la venta de los Mirage?
"Es muy importante que se entienda el contexto de cuáles eran las relaciones políticas en Bélgica y también entender cuáles eran las relaciones entre la DC belga y la chilena. Espero tener un intercambio con los diputados chilenos sobre los documentos que ya conocen y a los que yo espero agregar alguna documentación suplementaria en mi visita".
-¿Esos documentos tienen relación con la existencia de pagos irregulares?
"Sí, sí seguro, pero no quiero atizar la discusión en torno a esto. Pienso que podría llevar nuevos documentos, pero aún no estoy segura de conseguirlos a tiempo. Sé que hay listas de nombres, con gente implicada en Bélgica y también creo que hay nombres en Chile".
-En su visita a Chile, ¿también vendrá en busca de información?
"Sí, pero no estoy segura de si la gente de la Justicia en Chile cuenta con todos archivos. Cuando interpelé al ministro de Justicia (Stefaan De Clerck) en enero, me respondió que la justicia chilena está en poder de todos los documentos belgas".
A continuación señala que pese a sus esfuerzos, en Bélgica no existe la voluntad de las autoridades para aclarar el caso, ya que muchas de ellas ocupaban cargos de importancia en la época en que se negoció y concretó la venta de las aeronaves.
De hecho, el ministro de Justicia actual, Stefaan De Clerck ocupaba el mismo cargo en 1998, cuando se abrió la investigación, mientras que el actual titular de Defensa, Pieter de Crem, se desempeñaba como asesor del ministro de esa cartera, Leo Delacroix, a fines de los '90.
"En Bélgica, no existe la voluntad política para reabrir el proceso y por eso espero contar con la ayuda de Chile para poder hacerlo", puntualiza.
-Hace un tiempo el juez que lleva el caso en Chile, Omar Astudillo, envió dos exhortos a Bélgica solicitando información, ¿qué noticias ha tenido de ello?
"Le hice esa misma pregunta al ministro de Justicia y me dijo no sabía nada de esos exhortos, por lo que espero interrogar al respecto al ministro de Defensa, Pieter de Crem, pero como fue él mismo el que trabajó en la documentación de la reventa de los Mirage a Chile, no estoy segura de que quiera arrojar luces sobre este caso, ya que está implicado".
-Entonces, ¿qué responsabilidad le cabe en esto a los gobiernos de la época?
"Estoy segura que hay responsabilidad política de los dos gobiernos, eso es claro. Esté involucrada o no una empresa privada, una venta de material de la Defensa Nacional belga a la Defensa nacional chilena, implica opciones políticas y la opción política belga de la época era generar recursos. No sé cuál habrá sido la opción política de Chile para adquirir estos aviones, pero en todo caso, las orientaciones políticas son responsabilidad de los gobiernos".
-En ese contexto, ¿cuál será su principal aporte a la comisión investigadora?
"Mi contribución será informar sobre el contexto, aclarar bien quién estaba a cargo de las maniobras y en qué situación estaba el tablero político, qué pasaba en Bélgica en ese momento políticamente, y si puedo aportar nuevos documentos para ayudar a la justicia chilena a hacer su trabajo, espero hacerlo, pero no puedo garantizarlo".