Fiscalía advierte que hay una gran "cifra negra" de acoso a menores por Internet

SANTIAGO.- El grooming, la nueva modalidad adoptada por los pedófilos para acceder a sus víctimas vía Internet, cada vez va tomando más relevancia en Chile. Desde 2007 hasta la fecha, la Unidad Especializada en Delitos Sexuales de la Fiscalía Nacional, ya tiene 10 denuncias con investigaciones en curso y dos sentencias condenatorias.

“A pesar de ello, yo creo que aquí puede existir una tremenda cifra negra, ya que como no hay un contacto corporal directo e inmediato con las víctimas, muchas personas consideran que esto no podría ser un delito, y no denuncian”, dijo el director de la Unidad, Félix Inostroza.

Con la técnica del grooming, los sujetos -haciéndose pasar por niños- se hacen amigos de sus víctimas, para luego comenzar a seducirlos. Esto deriva en un cuadro de extorsión hacia el afectado, con el objetivo de concretar una cita personal con el menor y cometer un abuso sexual.

El Director de la Unidad, precisó que si bien el grooming no está tipificado como un delito, eso no implica que no se pueda condenar al agresor, bajo otros ilícitos.

“El grooming en sí no es un delito, porque es una forma para cometerlo, pero el ilícito que se realiza y que se concreta puede ser un abuso sexual, determinar a menores a que realicen conductas con contenido erótico o forzar a un niño a ver espectáculos con contenido sexual. Todo eso sí está sancionado y tiene una pena”, explicó Inostroza.

De hecho, precisó que las condenas que se han dictado sobre este tema fueron por producción de material pornográfico y por almacenamiento de éste.

“La primera sentencia fue en Pudahuel y la pena fue sobre los 5 años y un día, ya que se sumaron otros delitos, como apropiarse de la cuenta de correo electrónico de la menor (…), y la segunda fue en Rancagua, donde se condenó a cinco años”, ambas con privación de libertad, aseguró el Director.

Además, aseguró que dada la alta cifra negra, es difícil precisar si las víctimas son más mujeres que hombres, “por ejemplo, en Rancagua, también habían menores varones, ya que el imputado a veces, se hacía pasar por mujer”.

Incluso, recalcó que los agresores, generalmente, son sujetos con bastante conocimiento en computación, y que conoce la legislación pena, “ellos saben que es un delito, por eso toman los resguardos y elimina la información de su computador”.