La defensa había pedido exámenes psicológicos para Hernández.
Alex Valdés, El MercurioSANTIAGO.- La jueza de garantía de Puente Alto, Myriam Ortiz, rechazó hoy la petición de la defensora penal pública, Ximena Silva, que consistía realizar nuevos exámenes psicológicos a Jeanette Hernández Castro, madre de los hermanos Esteban y Pablo Rojo, atacados brutalmente en su casa de Puente Alto, lo que le causó la muerte al primero de ellos, en enero de 2008.
La defensora pedía además la suspensión de la investigación durante el tiempo que duraran los peritajes psiquiátricos y la evacuación del informe.
Durante la audiencia, la defensora leyó parte del informe de la psiquiatra Wilma Águila, quien sostuvo que Hernández tenía alucinaciones con extraterrestres y que escuchaba la voz de su hijo fallecido, quien le decía que estaba en el paraíso, lo que la tranquilizaba. El diagnóstico concluye que Hernández padece de psicosis endógena.
Dicho informe fue presentado por la defensa junto a las conclusiones de otros dos, que daban como resultado que Hernández padece problemas psicológicos.
La contraparte, el fiscal Pablo Sabaj, de la Fiscalía Metropolitana Sur, presentó a la jueza el informe del Servicio Médico Legal, que indica que Hernández pese a tener trastornos de personalidad "puede distinguir entre lo lícito y lo ilícito, lo que la hace imputable".
Sabaj señaló que si bien no se oponía a la realización de nuevos exámenes, sí rechazaba la suspensión del procedimiento, señalando que no era necesario hacerlo.
Finalmente, la jueza Ortiz rechazó la petición de la defensa argumentando que ya existían suficientes antecedentes acerca del estado de salud mental de la imputada y que no era necesario suspender el procedimiento.