VALPARAÍSO.- Un régimen jurídico general para el conocimiento, protección y respeto por los animales establece el proyecto que aprobó el Senado, en primer trámite legislativo y que pasó a la Cámara de Diputados.
La iniciativa legal, que tuvo su origen en dos mociones parlamentarias que pretendían sancionar el maltrato y la crueldad contra animales, alcanzó la unanimidad de la Sala, donde llegó con el informe favorable de la Comisión de Medioambiente que proponía refundir en un solo texto las dos mociones.
Durante el debate intervinieron los senadores Pablo Longueira, Juan Pablo Letelier, Antonio Horvath, Jaime Naranjo, Guido Girardi, Camilo Escalona, Alejandro Navarro y Nelson Ávila.
El senador Pablo Longueira, presidente de la Comisión de Medio Ambiente recordó que “el proyecto recoge la historia de dos mociones, una que lleva 14 años y, otra, que fue consecuencia de los problemas que originó la primera luego de que se perdieran las normas que sancionaban el maltrato”. Agregó que “la gran mayoría de las modificaciones se aprobaron o rechazaron por unanimidad manteniendo el espíritu del proyecto”.
Explicó que dentro de los principales perfeccionamientos “se aprobó incorporar en el texto legal una regulación sobre los experimentos en seres vivos, a fin de que puedan ser realizados por personal especializado tales como veterinarios, médicos, biólogos marinos u otros profesionales de ciencias afines”.
Por su parte, el senador Juan Pablo Letelier valoró las correcciones que se introdujeron al proyecto propuesto por la Comisión particularmente, en cuanto a la regulación de experimentos de seres vivos y la participación de profesionales capacitados. No obstante, lamentó que no se haya incluido la posibilidad de establecer “acciones legales públicas frente a ciertas situaciones de maltrato o crueldad animal”.
A su vez, el senador Antonio Horvath destacó que en este texto legal participaron activamente los representantes del Colegio de Veterinarios y de distintas ONG, como Pro Animal. Asimismo resaltó que si bien esta normativa significa un gran avance también quedan temas pendientes en relación a la protección animal.
En tanto, Jaime Naranjo coincidió con sus pares respecto a lo positivo de la iniciativa pero aclaró que “no se debe entender como maltrato a los animales conductas que son propias de la cultura campesina”. Advirtió que en este punto “se podrían producir contradicciones porque existe una frontera difusa”.
El senador Guido Girardi calificó esta iniciativa como “un tibio inicio de una relación entre los seres humanos y el resto de los seres vivos”. Recordó que la gran mayoría de las especies son anteriores al ser humano y sin embargo no existe una conciencia de respeto a la vida.
A su turno, el senador Camilo Escalona hizo notar que “en el proyecto el tema del abandono animal es insuficiente” y mantuvo su opinión en cuanto a que “en muchas regiones como la Décima, las jaurías de perros abandonados provocan daños a los campesinos que pierden muchos de sus animales de subsistencia por causa de estos perros salvajes, así que ojala esta situación sea tomada en cuenta por la Cámara de Diputados”.
El senador Alejandro Navarro, aseguró que “promover una cultura de protección a los animales es importante”, sin embargo, indicó que quedó pendiente en el proyecto la posibilidad de que las instituciones defensoras de los derechos de los animales puedan querellarse en contra de las personas que cometan actos de maltrato o crueldad”.
Finalmente, Nelson Ávila, se sumó al respaldo a la iniciativa como una forma de “reivindicar el largo y lento camino que ha debido recorrer una legislación sobre el maltrato animal y que recoge una sensibilidad especial hacia los animales”. Destacó además que este proyecto dará ¡un golpe de timón en la actual concepción cultural que existe sobre la convivencia animal”.